Esta bebida, de acuerdo con distintos historiadores, tuvo su origen hace más de cinco mil años, en el lejano oriente, específicamente, China; es la segunda más consumida en el mundo de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés).
En el mundo, datos de Quartz y Euromonitor señalan que Turquía es el país con más consumo de té a nivel mundial con 3.15 kilos por persona al año, seguido de Irlanda con 2.19 y Reino Unido con1.9 kilos al año.
También está Ruda con 1.3 kilos, Marruecos con 1.17 kg. México ocupa el último lugar de una lista que incluye 54 países.
Euromonitor Internacional realizó un estudio, y reveló que el mercado del té en México fue valorada en 62 millones de dólares durante 2016. Cifra que se espera crezca un 10 por ciento, alcanzando 68 millones de dólares aproximadamente. El mismo estudio, detalló que el nivel de consumo durante los últimos 6 años, ha sido de 7.8 tazas por persona al año.
Beber té, ya no es exclusivamente para curar malestares corporales, sino que se ha convertido en una gran tendencia en México, puesto que cada vez más personas lo consumen, incluso como parte de un estilo de vida healthy.

En gran medida, esto resulta también de la llegada de nuevas opciones para quienes gustan de esta bebida, así como la apertura de espacios donde consumirlo, a pesar de que en el país la bebida caliente más consumida es el café.
La consultora Euromonitor, afirmó que empresas como Tea Corp, McCormick y Empacadora Therbal, lideran la industria del con el 24, 14.5 y el 14.4 por ciento de participación, respectivamente.
Actualmente, una encuesta realizada en 2017, por la Procuraduría Federal del Consumidor, 85 por ciento de los mexicanos beben té, entre una y tres tazas al día. Otros estudios revelan que el consumo de café ha disminuído en generaciones como los llamados millenials.