El nuevo presidente de los Estados Unidos ya ha demostrado que le es difÃcil separar sus intereses empresariales y familiares de los asuntos públicos, como quedó evidenciado cuando Nordstrom dejó de vender hace poco, la lÃnea de ropa de su hija Ivanka. Y es que el uso de su cargo para promoción de asuntos propios, es un temor de que muchos albergan con respecto a Donald Trump, como mandatario.