Seguro no les tengo que contar la historia que Oscar Wilde escribiera el 20 de junio de 1890 y que causara tanto revuelo, sin embargo, para aquellos que no la hayan leído o visto en cine, ésta, narra la vida del joven y guapetón Dorian Gray mismo que fuera pintado en Londres por un famoso artista de la época llamado Basil Hallward y cuya lienzo, para sorpresa de Gray, envejece por él.