Hay varios elementos que distinguen a una buena oficina (o, en estos tiempos de pandemia, a un gran home office). No solo tiene que estar libre de distracciones para aumentar al máximo la productividad de los colaboradores. Asimismo, una buena decoración es necesaria para que la creatividad de los empleados pueda desatarse correctamente. Sin embargo, un elemento crucial que muchos llegan a olvidar o poner en segundo plano es la limpieza general del lugar.

Un área de trabajo limpia no solo es necesaria por un mero tema de higiene y respeto al equipo. En medio de una crisis sanitaria, puede ser literalmente una cuestión de vida o muerte para algunos colaboradores. Y por supuesto, la mugre y el desorden pueden llegar a ser unos distractores poderosos, que reducen la motivación y la concentración. A la vez, la limpieza es un proceso que, en un mundo ideal, debe ser realizado de una forma profesional y constante.

La plataforma perfecta para contratar servicios de limpieza

En este sentido, cada individuo debe hacer todo en su poder para asegurar que su espacio inmediato se mantenga lo más ordenado e higiénico posible. Pero aún así se requiere de un servicio de limpieza especializado que se encargue de los protocolos de sanitización. Hallar a buen personal para estas tareas, que sean responsables, constantes y estén disponibles en el momento y hora adecuadas, sin embargo, puede ser un reto. Justo ahí entra Mi Dulce Hogar.

Con esta aplicación, las personas y empresas pueden contratar un servicio de limpieza, ya sea esporádico o recurrente. Quienes prestan sus habilidades dentro de la plataforma tienen las habilidades necesarias para llevar a cabo el aseo general de una casa, o bien atender los retos específicos de las oficinas. Directamente desde la app se pueden hacer cotizaciones, agendar citas e incluso arreglar para que la misma persona atienda siempre a un espacio específico.

Otra de las promesas de esta plataforma es una particular atención en el tema de la seguridad y la confianza. La app apunta que tiene un equipo de criminólogos que revisa cuidadosamente el historial de cada uno de sus colaboradores. Y así, rechazan todos aquellos candidatos que podrían representar un riesgo a los clientes. De esta forma, no solo se obtiene un servicio de limpieza satisfactorio. También se obtiene la certeza que no habrá problemas de ningún tipo.