PAra nadie es un secreto que las logo y personajes de marca son uno de los activos más importantes para cualquier marca, ya que firmas como Pringles han logrado posicionar a estos elementos como una insignia que les permite estar cerca del consumidor.
Los números alrededor de la manera en la que estos elementos pueden aportar al negocio son claros.
Entre logo y personaje de marca
Así lo revela un estudio de la firma System1, citado por Adweek, el cual apunta que estos personajes ayudan a que las estrategias de marketing sean hasta un 37 por ciento más efectivas.
Adicional, las restricciones en el uso de estas mascotas de marca limita el poder de las firmas para incidir en las decisiones de compra de sus posibles compradores.
Recordemos que el 69 por ciento de los consumidores en México están dispuestos a pagar más por un producto que tenga un buen packaging, mientras que el 76 por ciento de las decisiones de compra se toman en el punto de venta. El empaque es fundamental.
Adicional, tenemos el juego de los logos, emblemas de marca que son algo más que una simple identificación de la firma en el mercado.
Recordemos que Cuando una imagen de marca logra ser memorable atrapa la atención de las audiencias un 13 por ciento más que aquellas cuyo fondo sólo es informar, al mismo tiempo que consiguen que los consumidores sean 7 por ciento más propensos a conocer sobre una firma y un 6 por ciento más a pensar que la marca tiene mejores niveles de innovación que su competencia, según estimaciones de Siegel+Gale.
Pringles tiene un nuevo rostro
Lo cierto es que aunque existen algunas marcas y productos que han logrado capitalizar estos elementos a su favor convirtiendo sus logos y personajes de marca prácticamente en un producto en si mismo, lo cierto es que la innovación es fundamental ante una creciente competencia en el marcado y un consumidor que evoluciona a pasos agigantados.
De esta manera, en meses recientes hemos visto como muchas firmas han modificado sus logos y personajes de marca y quizás uno de los más destacados ha sido el protagonizado por Pringles, marca que ahora mostrará a un Mr. P totalmente renovado.
Se trata del cambio de imagen más importante en dos décadas, en donde el icónico personaje de la firma adopta una apariencia más simple, sin duda con el fin de adaptarse al terreno digital.
“Por primera vez en 20 años, Pringles ha actualizado su inconfundible lata con un aspecto nuevo y fresco que presenta tonos llamativos y un diseño limpio, destacando los sabores inventivos y la forma única y apilable de las patatas fritas. Para complementar la nueva apariencia de la lata, Pringles también simplificó su mascota con bigote para resaltar mejor los sabores en cada lata y mostrar su nueva gama de emociones para combinar. Con una apariencia más elegante que incluye un bigote más dinámico, una pajarita más afilada, ojos brillantes y cejas expresivas, ‘Glow Up’ de Mr. P se centra en el sabor irresistible de cada pringles crujiente”, indicaron desde un comunicado de prensa emitido por Kellogg, empresas propiedad de Pringles.
DE esta manera, la mascota de la firma ahora luce sin el contorno de la cara, lo que permite resaltar su emblemático bigote. Además se han eliminado elementos incensarios como el brillo de los ojos para hacer de la pieza un icono más minimalista y adaptable a cualquier pantalla.
Además de este cambio, se anunció un rediseño en las latas para hacer de estos empaque algo más atractivo con información puntual sobre cada uno de los productos.
En este sentido, un cambio de imagen es algo más que dar una cara renovada a la marca. Se trata de un recurso que cuando es bien manejado se traduce en impactos positivos en términos de negocio.
Desde Marketing Insider Group, indican que un buen cambio de imagen de marca puede ayudar a una empresa a conectarse de mejor forma con un mercado objetivo nuevo o modificado, o ayudar a mantener un negocio a la vanguardia de la mente de sus clientes.