Las lluvias en la Ciudad de México no solo complican la movilidad diaria: también deterioran el pavimento hasta generar baches, una problemática constante que combina factores climáticos, técnicos y de mantenimiento.
¿Cómo se forma un bache en la CDMX?
1. Filtración del agua en el pavimento
Cuando el agua de lluvia se filtra por pequeñas grietas en la carpeta asfáltica, alcanza la base del pavimento, debilitándola. Esto provoca que, con el paso de los vehículos, la superficie colapse y se formen huecos. De acuerdo con expertos en infraestructura, este fenómeno es la causa principal del bacheo recurrente en temporada de lluvias.
2. Drenaje deficiente y hundimientos
En la capital, muchas vialidades carecen de drenaje adecuado. Esto genera encharcamientos que permanecen por horas o días, acelerando el desgaste. A ello se suma el hundimiento natural del terreno en varias zonas de la ciudad, que modifica la pendiente de las calles y concentra más agua de lluvia.
Tráfico pesado y materiales de baja calidad, algo que se debe analizar:
3. Materiales de baja calidad y mala compactación
El asfalto utilizado en varias calles suele ser de baja resistencia o aplicado en capas demasiado delgadas. Además, cuando la subrasante —el suelo que sirve de base— no se compacta correctamente, el agua penetra y debilita toda la estructura. Esto explica por qué algunas reparaciones duran apenas semanas antes de volver a fracturarse.
4. Tráfico pesado como factor agravante
El tránsito de vehículos, sobre todo camiones de carga y transporte público, ejerce una presión adicional sobre un pavimento ya dañado por la humedad. El peso rompe la carpeta asfáltica debilitada, haciendo que el bache crezca rápidamente.
5. Cómo se forma un bache en CDMX en 3 pasos (efecto pumping):
El proceso técnico puede resumirse en tres pasos:
- El agua entra por grietas.
- La subbase se debilita.
- El tráfico colapsa la superficie.
Este fenómeno, conocido en ingeniería vial como pumping, se acelera en ciudades con lluvias intensas como la CDMX.
6. Respuesta gubernamental y soluciones temporales
En temporada de lluvias, los reportes de baches casi se duplican, pero la mayoría de las soluciones aplicadas son reparaciones temporales. Programas como el “Bachetón” buscan dar respuesta inmediata, aunque especialistas aseguran que solo una repavimentación profunda y planificada fuera de temporada de lluvias ofrecería resultados duraderos.
Para reflexionar:
La lluvia deteriora el pavimento capitalino porque el agua infiltra las capas inferiores, agrava la debilidad de los materiales y, con el paso del tráfico, transforma grietas en baches. La solución no pasa por tapar hoyos, sino por invertir en infraestructura de calidad, drenaje eficiente y planeación técnica a largo plazo.