El entorno laboral vive un antes y un después luego de la emergencia sanitaria. En principio, es justo reconocer que hablamos de un entorno especialmente contraído, la contratación de nuevo personal deberá ser una tarea especialmente estratégica. Esquí en donde el método de contratación utilizado por Jeff Bezos cobra relevancia.

En principio es justo reconocer que, cuando menos en el mercado mexicano, las contrataciones parecen avanzar de manera lenta aún y cuando el proceso de reapertura lleva algunos menos de haberse puesto en marcha.

Entre despidos y pocas vacantes

En principio es justo reconocer que el mercado laboral, en México y el mundo está caracterizado por un alto índice de empleos perdidos.

Las últimas estimaciones entregadas por Banco de México (Banxico), indican que tan solo entre abril y mayo se perdieron más de 12 millones de empleos en el país tanto ten el sector formal como informal.

De manera puntual, se estima que de los 12 millones 180 mil empleos perdidos en el periodo indicado, 3.72 millones corresponden al sector formal y 8.46 millones al informal.

A pesar de que diversos sectores económicos han entrado a un proceso de reactivación, la realidad es que esta tendencia parece que seguirá, en diferentes proporciones, en lo que resta del año.

Cuando menos así lo indican los pronósticos de Banco Base, mismos que estiman que para el cierre del año se destruirán cerca de 1.86 millones de empleos formales, luego de que en julio se verían afectadas cerca de 31 mil 543 plazas.

Adicional a esto, la firma indican que a partir de agosto podría darse una segunda ola de desempleo en donde se perderían cerca de 223 mil 286 empleos, la cual se extendería hasta septiembre cuando se prevé que la pérdida de puestos laborales ascienda a 358 mil 681.

No obstante, las contrataciones comienzan a avanzar de manera importante. Cuando menos así lo refiere un reciente estudio firmado por OCC Mundial, el cual revela que  el 56 por ciento de los reclutadores en México ha puesto en pausa sus contrataciones, mientras que sólo 8 por ciento sigue contratando con normalidad y apenas el 2 por ciento está reclutando mucho más que en semanas anteriores. 

Las tres preguntas de Bezos

Con empresas que se leen débiles en más de un sentido, lo cierto es que cada contratación debe ser pensada no con mucho tiempo, sino con miras a obtener el mayor beneficio para la estructura interna.

Construir una marca tan sólida como Amazon, en buena parte, es resultado del exigente proceso de reclutamiento que el equipo de Jeff Bezos pone en marcha en donde, según asegura el portal Infobae, se pone en marcha la teoría la “regla de las tres preguntas”.

De acuerdo con la fuente antes citada en varias cartas redactadas por Bezos, el empresario ha indicado que tener los mejores candidatos es vital para subir los estándares de la compañía y hacerla cada vez mejor.

Entre las estrategias utilizadas, específicamente, hay tres preguntas importantes que Bezos se plantea sobre los nuevos colaboradores y que tu empresa debería de replicar.

El candidato ¿es digno de admiración?

Sin importar el puesto, para Bezos es importante que la plantilla laboral esté conformada por personas que sean dignas de admiración y de las cuales se pueda aprender algo.

De esta manera, esta es la primera pregunta que se hacen los seleccionadores de Amazon.

¿La persona subirá el nivel del grupo al que se integra? 

Esto va más allá de reconocer si la persona tiene la capacidad para cumplir labores específicas. Lo que está en juego es determinar si el nuevo integrante aporta un valor agregado a la empresa y si su contribución realmente supondrá un impacto para el área y la compañía en conjunto.

¿En qué área puede ser una superestrella? 

Esto tiene que ver con reconocer los talentos individuales de los empleados más allá de las experiencias y habilidades profesionales. Lo que se busca resolver es en dónde la persona puede ser una superestrella en otra actividad que no sea su trabajo diario.

Salir de la rutina diaria con talentos no conocidos le aporta innovación a la compañía, por lo que esa persona debe tener ese factor sorpresa que la saque del lugar común.