El valor de las marcas dentro del mercado se detona en todo momento, por factores sociales, naturales o económicos, que llevan la atención a sus productos o servicios, por lo que la publicidad es fundamental en la comunicación que mantienen dentro de este escenario.

Un dato que nos permite explicarlo es la inversión que se espera a nivel mundial para este 2017: 511 mil millones de dólares, de acuerdo con estimados de Magnaglobal y Statista estimates, que advierten un crecimiento de la industria a partir de este ranking de inversión, que ha evolucionado desde los 388 mil mdd registrados en 2007.

Tal apuesta de las marcas a través de la publicidad ha llevado a muchas compañías como KFC, a lograr marcar una pauta a través de acciones sumamente creativas.

Un ejemplo de ello lo encontramos con el reciente lanzamiento de un cassette con el que la compañía se mantiene en su línea de hacer publicidad creativa, de la mano de agencias que incluso han querido llevar el pollo de la cadena al espacio.

El discurso con el que cuentan las campañas publicitarias se ha determinado e gran parte por el interés que parecen tener, por lograr establecer una diferencia ante la competencia tan cerrada que enfrentan.

Competir en la industria ha llevado al lanzamiento de nuevos productos, la colaboración con marcas socias y elaborar estrategias que parecen cobrar relevancia cada vez más, sobre todo en un instante en que el consumidor exige mayor experiencia de marca a través de estas ideas.

Un segundo ejemplo lo encontramos con el lanzamiento al mercado de acciones que buscan mayor empatía con el mercado y la acción ocurrió nada menos que de manos de otra fast food: McDonald’s, luego de que esta convirtió sus cajitas feliz en piezas desarmables para formar visores de realidad virtual.

KFC y su cassette

McDonald’s y su visor de RV