Lacoste acaba de dar un golpe maestro al fusionar moda y cultura pop, su clásico cocodrilo muta en nada menos que Godzilla, el rey de los monstruos, para protagonizar una colección cápsula que verá la luz este 19 de septiembre en Japón.
Bajo el lema “Play Together”, la firma francesa invita a reinterpretar símbolos y a jugar con universos aparentemente opuestos: la elegancia deportiva de Lacoste y el poder descomunal del kaiju más famoso del cine.
El cocodrilo se convierte en Godzilla
El detalle más llamativo de la colección está en el logotipo. El cocodrilo, emblema de la casa desde hace casi un siglo, aparece transformado con las icónicas espinas dorsales que recuerdan la silueta de Godzilla. Esta evolución no solo es un guiño estético, sino también un mensaje de reinvención constante en el mundo de la moda.
Las piezas incluyen camisetas, polos, sudaderas y gorras adornadas con ilustraciones que fusionan la identidad de Lacoste con criaturas legendarias como Mothra y King Ghidorah.
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Y es que la apuesta de Lacoste no se limita a las prendas. Las tiendas insignia de Harajuku y Hibiya adoptarán un nuevo diseño inspirado en el universo kaiju: una figura gigante de Godzilla y Mothra Larva dominará la primera, mientras que King Ghidorah será el protagonista en la segunda.
Además, se abrirá una pop-up store en Shibuya PARCO, epicentro cultural de Tokio, donde la experiencia inmersiva promete atraer tanto a fashionistas como a coleccionistas de cultura pop.
El impacto de cambiar un logo en las marcas
Modificar un logotipo, aunque sea de forma temporal, no es una decisión menor: el logo es el rostro de la marca y condensa décadas de historia y valores. Por eso, cuando una firma global como Lacoste se atreve a transformar su símbolo más reconocido, envía un mensaje poderoso.
En marketing, los cambios de logo funcionan como generadores de conversación y herramientas para conectar con nuevas audiencias. Marcas como Pepsi, Burberry o incluso Meta han usado la actualización de sus emblemas para mostrarse más contemporáneas y reforzar su presencia digital.
En este caso, Lacoste no solo actualiza su identidad visual, sino que la fusiona con un ícono cultural japonés, lo que potencia el impacto emocional entre consumidores. La estrategia le permite abrirse paso en un mercado saturado y captar la atención de las nuevas generaciones que valoran la autenticidad, la cultura pop y las colaboraciones disruptivas.
La unión entre Lacoste y Godzilla refleja la tendencia de las marcas globales a reinventar sus símbolos para mantenerse relevantes. Japón, con su enorme tradición en el diseño de moda urbana y su devoción por los íconos cinematográficos, se convierte en el escenario perfecto para esta colección.
Con disponibilidad en tiendas físicas seleccionadas y en la tienda online oficial de Lacoste Japón, esta cápsula no solo apunta a convertirse en un éxito de ventas, sino también en un fenómeno viral que refuerza el vínculo entre moda, entretenimiento y cultura pop.
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