La muerte de Fidel Castro ha generado un gran impacto y opiniones divididas. Lo que es un hecho son las características que la revolución dejó en Cuba. Una de estas es la prohibición de la publicidad en la isla.

En la década de los 50 Fidel Castro llegó al poder en Cuba tras una revolución armada apoyada por la mayoría de la población y que derrocó al presidente Fulgencio Batista. Desde entonces la isla sufrió una evolución distinta a la de los demás países de América Latina.

En Cuba el analfabetismo es inexistente y es conocida la calidad de sus servicios de salud. Al mismo tiempo la libertad de expresión es mínima y el Estado tiene un duro control sobre las actividades de la población.

Cuba tiene un gobierno comunista y desde hace décadas sufre los estragos de un embargo comercial impuesto por Estados Unidos que no permite que muchas marcas de otros países puedan comercializarse en la isla.

Uno de los temas que más llama la atención sobre la nación caribeña, especialmente para quienes trabajan en marketing y publicidad es que se dice que no hay campañas publicitarias en Cuba. Esto es cierto pero no del todo.

En las calles de La Habana, la capital, no hay publicidad exterior ni pendones en los postes como en las demás ciudades del continente americano. Existen algunas carteleras pero todas muestran mensajes del gobierno comunista invitando a la unidad y criticando el bloqueo económico.

Pero hay marcas extranjeras que sí se ven en Cuba. En la zona turística hay sombrillas con la leyenda Lucky Strike, de British Tobacco Company. Esa marca de cigarrillos también se puede encontrar en los bares y restaurantes más populares de La Habana donde hay displays de tamaño mediano. Otras marcas fáciles de encontrar en La Habana, en las cantinas, son Heineken y la cerveza mexicana Sol.

Aunque no cuentan con campañas publicitarias, hay varias marcas cubanas que sobresalen en el entorno por su presencia, tal es el caso de las bebidas alcohólicas Havana Club, Bucanero y Cristal. En el caso de los centros comerciales, la cantidad de anuncios es mínima y se ven marcas como Adidas y Joma. En los espacios públicos también existen algunos letreros sobre exposición con pequeños logotipos de compañías extranjeras como Aeroméxico.

Existe la creencia de que la muerte de Fidel Castro traería cambios en Cuba, pero estos podrían ser más lentos de lo que los entusiastas creen, especialmente con el próximo gobierno de Donald Trump, quien enfriará los cambios promovidos por Barack Obama.