Suscríbete a Merca2.0. Haz clic aquí

El riesgo reputacional del Greenwashing

En los últimos años, la sostenibilidad es un gran reto para las compañías que deben adaptarse a esta nueva forma de hacer negocios y reportar resultados ante sus grupos de interés.

Es fundamental cambiar la forma en la que se gestionan los negocios y darle la importancia que se merece al compromiso con la sostenibilidad. Sin embargo, para generar un impacto a nivel ambiental, social y de gobernabilidad se necesitan estrategias integrales basadas en datos y con objetivos muy claros que sean congruentes con las necesidades de las empresas, las acciones aisladas ya no son suficientes.

Citando a Leticia Alvarez, co-directora del programa “Sustainability Your Competitive Advantage” de IE Executive Education, “la sostenibilidad no es solo medio ambiente, va mucho más allá, sostenibilidad se refiere a economía, forma de trabajo, modelo de negocio, acceso a mercados y clientes nuevos, atracción de talento a nuevas generaciones que buscan más allá de un sueldo, es toda una concepción del modelo productivo.”

La rendición de cuentas del impacto que las empresas tienen en el medio ambiente y en las comunidades donde tienen presencia es cada vez más apremiante. El pasado mes de noviembre, el Parlamento Europeo aprobó la propuesta de Directiva sobre información corporativa en materia de sostenibilidad (CSRD por sus siglas en inglés). El objetivo es que las empresas informen periódicamente sobre el impacto que su actividad empresarial tiene en las personas y el medio ambiente. La iniciativa será efectiva en 2023 para los grandes corporativos y en 2026 para las pequeñas y medianas empresas.

Asimismo, la iniciativa Impact Weighted Accounts (IWA por sus siglas en inglés) tiene el propósito de impulsar reportes que reflejen el desempeño en materia financiera, social y ambiental de las empresas.

La transparencia de los datos busca fomentar la toma de decisiones informadas y, con ello, redefinir de una manera más amplia la rentabilidad de las empresas.

La transición hacia modelos corporativos sostenibles no es una tendencia, es una necesidad real para garantizar la viabilidad de los negocios en el largo plazo.

En ese sentido, toda estrategia ESG (ambiental, social y gobernanza) debe partir de un diagnóstico y datos que establezcan las áreas a mejorar y que soporten su implementación, con objetivos medibles, acciones específicas y un seguimiento puntual para poder evaluar los resultados concretos de cada una de las iniciativas, así como de la estrategia en su conjunto.

Esto nos ayuda a evitar el “greenwashing”, una mala práctica que se lleva a cabo, en ocasiones sin conocimiento, en la que algunas compañías buscan subirse al modelo de negocio ESG sin contar una estrategia integral basada en acciones específicas que sustenten su implementación y resultados. De acuerdo con la Comisión Europea 50 por ciento, de las afirmaciones ecológicas carecen de fundamento, es decir, son promesas vacías. Por ello, detrás de cualquier estrategia de comunicación relacionada con el impacto de una empresa en la agenda de desarrollo sostenible debe ir acompañada de evidencia.

En palabras de Sofía Ambrosi, socia de Zimat Consultores, “El valor de la comunicación es clave para generar confianza en las audiencias. Hablar de las iniciativas ESG que llevan a cabo las empresas tienen un impacto directo en su reputación. Para que este impacto sea positivo la información debe ser genuina, con datos confiables, mensajes claros y transparentes para dar a conocer las acciones que se están llevando a cabo, sus avances y resultados. Sin embargo, el “greenwashing” daña la reputación de las organizaciones porque genera desconfianza en sus audiencias y resta credibilidad sobre sus compromisos adquiridos”.

La sostenibilidad es un gran reto para las compañías que deben adaptarse a esta nueva forma de hacer negocios y reportar resultados ante sus grupos de interés. Pero es necesaria y se puede convertir en una gran oportunidad en términos reputacionales. Para ellos es indispensable involucrar a todas las áreas de la organización, contar con una estrategia que tenga objetivos claros y establecer una metodología coherente que permita a las empresas saber qué están haciendo bien y cuáles son sus áreas de oportunidad. Y, por supuesto, es fundamental contar con una estrategia de comunicación eficiente que acompañe todo el proceso.

 

Obtén un més gratis a Merca2.0 premium

Cancela en cualquier momento
Acceso exclusivo a rankings y radiografías.
Análisis profundos y casos de estudio de éxito.
Historial de la revista impresa en formato digital.

¡Disfruta de lo mejor del marketing sin costo alguno por un mes!

Más de 150,000 mercadólogos inscritos en nuestros boletín de noticias diarias.

Premium

Populares

Únete a más de 150,000 lectores

Regístrate a nuestro newsletter en la siguiente forma y recibe a primera hora las noticias más importantes de mercadotecnia, publicidad y medios en tu correo.

Más de Merca2.0

Artículos relacionados

You don't have credit card details available. You will be redirected to update payment method page. Click OK to continue.