Por Israel Zepeda
Entre lanzamientos y desapariciones, la industria de las revistas reunió seis mil 184 millones de pesos en ventas totales durante el 2008.
La revista Electronic Gaming Monthly (EGM), editada por Editorial Televisa, lanzó su último número publicado el pasado mes de diciembre. Este impreso, pionero en el periodismo de videojuegos, debe su salida del mercado a que en los Estados Unidos, la empresa que se encargaba de publicar doce números al año desde 1989, Ziff Davis, recientemente adquirió el sitio de internet 1Up, un portal con la misma temática. Fue entonces que se anunció el cierre de la versión impresa en el territorio estadounidense para comenzar a publicarla en internet.
La edición de enero de este año es la última en publicarse, mientras que el número de febrero será el primero en aparecer como una edición virtual. De esta forma, EGM se une a la lista de impresos que publicaron su último número durante 2008: La Mosca (Editorial Toukan), Switch (Editorial Premiere), Eres Niños, Nickelodeon (ambas de Editorial Televisa), Yates, Audi, Ambientes (las tres de Grupo Editorial Expansión) y Sputnik (Idoru Media) —ésta última emigró del papel al internet en su totalidad—.
Contrario a esto, algunas editoriales realizaron esfuerzos para publicar nuevos productos que se encuentran actualmente en el punto de venta: Psychologies, F1 Racing, Esquire México, AutoBild México y 192. Cuatro licencias, más una propuesta original, buscan la preferencia del lector mexicano.
Así se definió el 2008, un año de inversiones editoriales. Fue gracias a estos movimientos y estrategias que el monto de inversión publicitaria obtenido fue de un aproximado del cinco mil 323 millones de pesos. De igual manera, la cifra total en cuanto a circulación neta pagada rondó en 861 millones de pesos. Todo esto de de acuerdo con la investigación de Merca2.0 y datos otorgados por 37 editoriales.
Con todas las cartas sobre la mesa, los jugadores de la industria describen al 2009 como un año retador, el cual deben recorrer con cautela, ya que ocho de cada diez revistas nuevas no llegan a su cuarta edición. Así lo asegura Manuel Rivera, director general de Grupo Editorial Expansión. “Por esto es importantísimo mantener la calidad en los contenidos. Por ejemplo, todas nuestras revistas tienen un proceso de mejora continua, el cual ejecutamos edición tras edición. De esta manera, hemos aprendido que los buenos contenidos aún mandan en un mercado tan competido como el de las revistas. Asimismo, decidimos dejar de publicar impresos pequeños dentro de su mismo nicho, esto con la finalidad de mantener un portafolio joven y dinámico”, indica Rivera.
La siguiente información es exclusiva para internet.
Letras internacionales
Además de los impresos nacionales que se encuentran en los puntos de venta, México también cuenta en su mercado editorial con varios productos importados de diversas partes del mundo. Lucía Álvarez, gerente de publicadores internacionales en Distribuidora de Impresos (DIMSA), indica que son cerca de mil 500 títulos los que se traen a nuestro país, ya sea de manera semanal, quincenal y mensual. “Los ejemplares que alcanzan mayor venta son los de decoración europeas y las de moda para mujer. Vogue (versión norteamericana, inglesa, española y francesa) y Glamour son las número uno en ventas. Este último título vende más del 60 por ciento del tiraje importado, el cual consta de 60 mil ejemplares”, afirma Álvarez. Asimismo, la edición norteamericana circula cada mes con cinco mil ejemplares, mientras que la inglesa y francesa sólo con 200.
Otros de los títulos que son importados por Dimsa son Q Magazine — Inglaterra—, Rolling Stone —Estados Unidos—, Uncut —Inglaterra—, Newsweek —Estados Unidos—, The Economist —Estados Unidos— y Time —Estados Unidos—.
“Nosotros como distribuidores le entregamos productos a grandes mayoristas, como Sanborns y Wall*Mart. Debido a la crisis, el mercado en general se ha reducido en cuanto a la venta de los impresos. Por lo mismo, haremos ajustes, ya que no podemos importar impresos que no se venden en México. Algunos títulos que comenzamos a traer con cinco mil ejemplares los hemos reducido a tres mil, como fue el caso de Condé Nast Traveler España”, detalla la gerente.
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