- La campaña “De nada” se lanzó en Portugal con piezas gráficas desarrolladas por Ogilvy Madrid.
- El enfoque visual gira en torno a envases vacíos de productos como quesos, embutidos, mermeladas y atún, en lugar de mostrar el pan directamente.
- Es parte de una estrategia mayor que inició en España en julio, y continuará al menos durante agosto y septiembre.
Una apuesta visual que dice más con menos
En un mercado saturado de mensajes directos y pantallas explosivas, Bimbo Portugal estrenó una campaña que articula ingenio, humor e identidad cultural.
Bajo el lema “De nada”, la marca mexicana celebra el lanzamiento de una nueva rebanada de pan, más grande, a través de un enfoque visual sutil pero contundente: en lugar de exhibir el producto, se muestran los envases vacíos de los acompañamientos más habituales del desayuno portugués: quesos, embutidos, mermeladas, atún y otros clásicos de la mesa compartida.
Humor en negativo: el envase vacío como protagonista
La creatividad de Ogilvy Madrid encuentra su fuerza en una pared blanca y vacía que, paradójicamente, sugiere todo lo que podríamos acompañar con una rebanada extra ancha de pan.
Es una invitación no a la sobredosis de información, sino a la imaginación del consumidor, que completa mentalmente la escena: “más pan, más oportunidades de disfrutarlo”.
Frente a este silencio visual, el escueto pero cargado “De nada” funciona como un botón de descarga cómica: Bimbo agradece, con un dejo de humor irónico, abrir espacio en la mesa. No es un agradecimiento frío, sino casi una cofradía entre marcas que comparten fotos y sabores.
España marca el paso, Portugal arrima la mesa
Aunque la campaña debutó en el mercado español en julio de 2025, Portugal la recibió con desde el 25 de agosto, y ambas geografías comparten una apuesta: celebrar el pan desde la evocación, desde la cotidianidad, desde la mesa que reúne y en la que el desayuno es el vínculo.
El plan es que este diálogo visual se despliegue durante agosto y septiembre, reforzando el mensaje en ambas orillas ibéricas.
Una estrategia con sabor local que aflora lo cotidiano
Más que vender pan, Bimbo apuesta a reconquistar la dimensión familiar de un instante fundamental: el desayuno o la merienda compartida. El mercado portugués valora profundamente el sentido de comunidad, y esta campaña capitaliza esa sensibilidad con modestia (y maestría).
Al resaltar las “marcas vecinas” que acompañan su pan (esos quesos, embutidos y conservas) Bimbo no sólo anuncia un producto, sino que da un paso más: se inserta en las historias de consumo local, confía en el buen gusto compartido, suma sin restar. Es una estrategia conceptual que reafirma la conexión de la marca con el día a día de los portugueses, sin estridencias, sólo con inteligencia visual.
Recursos de la campaña de Bimbo en Portugal
- Utiliza el silencio visual como recurso poderoso, evitando la saturación informativa.
- Enriquece el mensaje a través del humor sutil, que conecta sin subestimar.
- Refuerza el sentido cultural y local, clave en mercados sensibles a la identidad.
- Aprovecha una idea simple pero memorable: el envase vacío comunica más que una imagen del producto.
- Genera empatía con el consumidor, al situarse en el centro de un acto cotidiano: compartir.
Este tipo de enfoque (mínimo, irónico, conectado) resulta atractivo para referentes del marketing y la publicidad porque demuestra que no hace falta gritar para captar atención: una idea bien cocida puede abrir apetito.
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