Sin duda una de las marcas más emblemáticas en el mercado es Disney. La empresa de entretenimiento que utiliza como bandera a Mickey Mouse tiene cerca de 94 años de historia en la industria y a pesar de los cambios que el mercado, el sector y las audiencias han experimentado en estos años, hablamos de una firma vigente y sana.

Durante 2016, la marca se ubicó como la marca más poderosos del mundo de acuerdo con la consultora Brand Finance, mientras que durante este año se ubicó dentro de las empresas más valiosas con un valor de 47 mil 500 millones de dólares.

Una de las cuestiones que llama la atención es el especial aprecio que las generaciones de consumidores más jóvenes expresan por esta marca. Un informe entregado por la agencia independiente MBLM revela que Disney es la marca que mayor experiencia y éxito tiene para despertar emociones en los millennials.

Entender como es que esta marca logra conquistar a niños y adultos aún cuando el tiempo pasa puede dar algunas lecciones que se pueden aplicar al negocio propio.

En este sentido, compartimos tres puntos clave y básicos que explican el secreto de Disney para en la preferencia de las audiencias:

Crecer con las audiencias

Uno de los grandes aciertos de la marca es que ha encontrado la forma de crecer junto con su audiencia. De esta manera, paso de ser una productora de filmes infantiles a una empresa de entretenimiento. Sus parques de atracciones así como sus cruceros fueron parte de la evolución; no obstante, el paso que marcó la diferencia fue la compra de Marvel durante 2009 por 4 mil millones de dólares.

Estas extensiones de negocio se suman a la habilidad de la empresa para conectar con cada segmento de la audiencia de forma individual de manera única para cada plataforma de comunicación.

Estrategia corporativa solida

Como se mencionó en el punto anterior, Disney es una empresa que ve más allá de la industria cinematográfica; hablamos de una compañía que vende experticias. No es sólo una cinta para niños, es un paseo por el parque, un juguete, un musical y todo un entorno que gira alrededor de los personajes.

El fundador de la empresa deseo y desarrolló una estrategia con una amplia visión sobre como la mercadotecnia trabaja alrededor de sus películas, al explotarla en todos los sentidos.

Todo esto quedó plasmado en la siguiente infografía que desde 1957 guía el negocio de la firma. La marca sigue el principio de la teoría de Walt Disney, pues aún con el desarrollo tecnológico, las nuevas plataformas y canales de comunicación, la base de su estrategia es la misma.

Lo anterior habla de una estrategia corporativa sólida que no se destruye, sólo se transforma para adaptarse a los cambios del mercado.

Ir de lo local a lo global y viceversa

Si bien una regla básica para muchas empresas es ir de lo local a lo global, Disney afirma que también se debe de ir de lo global a lo local con el mismo rigor.

Es decir, si bien su película Moana está basada en fábulas y leyendas de la Polinesia que tienen siglos de antigüedad por lo que fue necesario que cineastas estudiarán tres años dicha cultura para garantizar que fuera una historia que conectará emocionalmente con dicho mercado, también es cierto que en su distribución mundial se cambiaron algunos detalles para hacerla familiar e interesante para otros públicos.

Generar todo desde un lugar implica menos movilidad; para ser relevantes ha que tener la capacidad de entender a los jugadores globales relevantes así como a los locales y actuar en consecuencia en una línea de dos vías.