Criptomonedas y la revolución financiera

Las criptomonedas han emergido como fuerzas disruptivas que están redefiniendo el panorama financiero global. En la última década, estos activos digitales han ganado una prominencia sin precedentes, desencadenando una revolución financiera que desafía las convenciones tradicionales y abre nuevas posibilidades para inversores, instituciones y la economía en su conjunto.

Las criptomonedas introdujeron el concepto de descentralización, eliminando la necesidad de intermediarios tradicionales como bancos y gobiernos, estas monedas digitales permiten transacciones peer-to-peer, otorgando a los individuos un mayor control sobre sus activos y transacciones financieras.

Claro que la revolución financiera impulsada por las criptomonedas se fundamenta en la tecnología blockchain, ya que esta innovación descentralizada y segura ha demostrado ser resistente a la manipulación y la falsificación, estableciendo un nuevo estándar de transparencia y confianza.

De hecho, el valor de las criptomonedas ha crecido bastante en los últimos años, atrayendo el interés principalmente de inversores privados que pueden elegir entre dos opciones: minar la moneda ellos mismos o adquirirlas en un intercambio. Cabe destacar que la rentabilidad del minado varía mucho en función de la complejidad de la divisa, pues a mayor dificultad, mayor es el consumo de tiempo y electricidad. Por ello, cada día más inversores optan por comprar monedas digitales a un operador, las cuales son almacenadas en un monedero digital.

Y es que las criptomonedas han abierto las puertas a la inclusión financiera global. Personas sin acceso a servicios bancarios tradicionales ahora pueden participar en la economía global utilizando simplemente un dispositivo con conexión a Internet, democratizando el acceso a servicios financieros.

Sin embargo, no todo son ventajas. Por una parte, las criptodivisas siguen a día de hoy sin estar reconocidas como medio oficial de pago a nivel mundial, salvo excepciones como la de El Salvador, pionero en aceptar el bitcoin como moneda de curso legal en septiembre 2021. Justo la actitud opuesta es la adoptada por China, que ha prohibido el intercambio, la obtención y la circulación de criptomonedas dentro de sus fronteras.