• En América Latina, un estudio de Ipsos reveló que el 72% de los consumidores considera importante que las marcas contribuyan activamente a resolver problemas sociales.

• En un informe del Edelman Trust Barometer, se señaló que el 63% de los consumidores eligen comprar de empresas que comparten sus valores.

• El 43.5% de la reputación corporativa está vinculada a la responsabilidad social, ética empresarial y trato a empleados, según el Reputation Institute.

Se ha dado a conocer el cierre total de las sucursales de Costco en el estado de Arizona, Estados Unidos por un lapso de hasta 24 horas, lo cual forma parte de una medida coordinada a nivel nacional para conmemorar el Memorial Day, una fecha federal dedicada a honrar la memoria de los soldados estadounidenses que perdieron la vida en servicio militar.

Aunque, esta pausa en las actividades de Costco representa también una oportunidad para sus competidores, quienes se preparan para acaparar parte del flujo de clientes durante ese y otros días festivos del país.

Cabe destacar que para este 2025 se el Memorial Day se celebrará el lunes 26 de mayo, aunque hay que tener en cuenta que Costco también interrumpe sus operaciones durante el Día de la Independencia (4 de julio) y el Día del Trabajo (primer lunes de septiembre). El objetivo, según la empresa, es permitir que sus empleados tengan la oportunidad de reflexionar sobre la importancia de estas fechas y pasar tiempo con sus seres queridos.

Tal y como informó The Sun, esta medida ha generado inquietudes entre los compradores habituales, quienes se han visto obligados a adelantar sus compras del fin de semana. Algunos incluso han comenzado a buscar alternativas, destacando tiendas como Walmart o cadenas locales que sí operarán con horarios modificados durante el feriado.

Más allá del impacto comercial, este cierre también pone sobre la mesa una conversación importante: la necesidad de preservar el significado de las fechas conmemorativas en medio del ritmo acelerado del consumo. El Memorial Day, originalmente establecido para recordar a los caídos en la Guerra Civil, se ha transformado en un símbolo de respeto hacia todos los soldados que se han ido en combate.

En ese sentido, lo que podría verse como una simple interrupción del servicio, también puede entenderse como un gesto de humanidad y compromiso social por parte de una de las empresas más influyentes del retail. Y aunque los consumidores puedan verse brevemente afectados, el recordatorio de honrar a quienes dieron su vida por su país es, sin duda, una pausa que vale la pena.

Y es que, la reputación corporativa y la responsabilidad social son dos pilares que definen cómo una marca es percibida por sus consumidores, empleados, inversionistas y la sociedad en general. En un entorno cada vez más conectado y transparente, la forma en que una empresa actúa más allá de sus productos o servicios puede determinar su éxito o su caída. Estudios han demostrado que una buena reputación no solo influye en la confianza del consumidor, sino que también impacta directamente en las decisiones de compra, recomendación y hasta en la atracción de talento.

De acuerdo con el Reputation Institute, mejorar tan solo cinco puntos en el índice de reputación puede incrementar en un 6.4% la intención de compra de los consumidores, y en un 6.1% su disposición a recomendar la marca. Esto indica que las percepciones intangibles como la ética, la transparencia y el compromiso social pesan casi tanto como el precio o la calidad de un producto. Además, el 43.5% de la reputación corporativa está relacionada directamente con las acciones de responsabilidad social y la percepción de que la empresa actúa de forma responsable con sus empleados, la comunidad y el medio ambiente.

En un informe del Edelman Trust Barometer, se señaló que el 63% de los consumidores eligen comprar de empresas que comparten sus valores, y el 52% esperan que las marcas tomen una postura activa frente a los desafíos sociales y medioambientales. Este nuevo consumidor exige coherencia entre lo que las marcas comunican y lo que realmente hacen, lo cual ha llevado a muchas empresas a adoptar estrategias más consistentes de sostenibilidad, diversidad e inclusión, transparencia fiscal, y trabajo digno.

En América Latina, un estudio de Ipsos reveló que el 72% de los consumidores considera importante que las marcas contribuyan activamente a resolver problemas sociales. Este dato subraya cómo la responsabilidad social no solo se percibe como un gesto ético, sino como una obligación esperada por parte del consumidor moderno.

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