Al tiempo que el confinamiento comienza a relajarse en gran parte del mundo, la publicidad ha comenzado a adoptar tintes distintos para abrazar a la ansiada “nueva norma normalidad” y lo que hace Burger King es quizá uno de los mejores ejemplos.
En medio de la cuarentena, la marca se mantuvo especialmente mesurada en sus mensajes, con piezas y campañas publicitarias enfocadas más a servir al consumidor que a publicitar sus característicos productos.
Publicidad en la mueva normalidad
Hoy el consumidor exige un cambio en el discurso. Luego de un momento en el que fue especialmente valorada la comunicación relacionada con el reconocimiento al sector salud y muy enfocada a reforzar las medida de prevención frente al COVI-19, ahora la exigencia está en el regreso a las actividades y la nueva normalidad.
Basta recordar los resultados de una reciente encuesta realizada por Twitter, misma que ha entregado las siguientes conclusiones:
- El 64 por ciento de los consumidores asegura que las marcas deberían continuar anunciando su productos con normalidad.
- Para el 52 por ciento este contenido le ayuda a reencontrarse con la anhelada normalidad en su vida.
- El 93 por ciento de los consumidores se dice fastidiado de la tonalidad actual de la publicidad y asegura que debe cambiar.
- En redes sociales se espera que las marcas toquen las siguientes temáticas:
- Apoyo a personal de salud que trabaja contra la pandemia (82 por ciento)
- Ayuda a las personas más vulnerables (86 por ciento)
- Información veraz y confiable (89 por ciento)
- Gestos de amabilidad y de empatía (74 por ciento)
Bienvenidos a los ansiosos
Así Burger King ha comenzado a retomar en sus campañas más recientes estas anheladas escenas de normalidad y la ejecución más reciente de la firma da cuenta de ello.
A medida que la cadena de comida rápida ha comenzado a reaperturar sus drive-thrus y restaurantes en Francia, la empresa dueña de la clásica Whopper ha decidido hacer un guiño a sus clientes más ansiosos, quienes no pueden llegar a casa para disfrutar de los productos de la compañía.
De esta manera, ha emplazado una serie de anuncios que muestra las escenas que, sin duda, más de un consumidor ha visto en su auto, luego de visitar un restaurante de Burger King, pedir un combo para llevar y sin llegar al destino ya haber comido la mayoría o en su totalidad los alimentos.
Así en las imágenes se muestra, por ejemplo, unos asientos de cuero con papas fritas aplastadas, salsa en el volante y demás sobras en la palanca de velocidades de un vehículo, escenas que se acompañan del copy “Bienvenidos a los impacientes”.
Esta campaña fue creada por la agencia creativa Buzzman y sin duda se trata de un ejemplo más de cómo la publicidad ha comenzado a abrazar la nueva normalidad.