En pleno Mundial de Rusia 2018 el Barcelona presentó su segunda equipación de cara a la temporada 2018-19 en la que de nueva cuenta parte como favorito para ganar las competencias en las que participará, en especial la UEFA Champions League, torneo que no gana desde la edición 2014-2015 y que en las tres últimas participaciones no pasa de los cuartos de final.
Debido a ello, y como un acto de cábala y nostalgia por parte de los aficionados, el uniforme alternativo será amarillo, similar a los que utilizó durante los torneos 2005-2006 donde levantó la orejona por segunda ocasión en su historia de la mano de Frank Rikjaard; así como en la campaña 2008-2009 donde logró el primer triplete con Pep Guardiola.
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La reacción de los seguidores del equipo en las redes sociales se identificaron con esos momentos, lo que generó una sensación de añoranza de aquellas épocas de gloria por parte del equipo catalán. Recurrir a esta estrategia para conectar con la afición es parte también de las prácticas de los equipos deportivos, quienes recurren generalmente a la cábala con tal de mantener rachas positivas o salir de un mal momento.
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— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) 2 de julio de 2018
Ejemplos de lo anterior sobran en el mundo del deporte, el exentrenador de la Selección Mexicana de Futbol, Ricardo Antonio La Volpe utilizó una corbata de dragones durante el Mundial de Alemania 2006; por su parte le tenista Serena Williams bota cinco veces la pelota antes de sacar su primer servicio.
LeBron James, nuevo jugador de los Lakers, antes de los partidos se pone el protector bucal y lanza talco al aire; incluso en tiempos de playoffs no usa sus redes sociales.
De tal forma que para el Barcelona, regresar a los momentos de gloria tiene que ver también con una situación de suerte, a pesar de los recursos humanos con los que cuenta para levantar los títulos, como un instituto deportivo, se vale de estos recursos para mejorar su situación.
Algo que no cae en desagrado para sus patrocinadores, ya que esto incrementa sus ventas de mercancías, en especial, en momentos en los que el equipo genere una racha positiva.
