
En un giro inesperado dentro del panorama del comercio minorista, las Tiendas 3B —reconocidas por ofrecer productos a bajo costo en zonas populares— se han colocado en el centro de la conversación digital al revelarse la existencia de una sucursal en el corazón de Polanco, una de las zonas más exclusivas de la Ciudad de México. Esta presencia ha despertado tanto la curiosidad como el debate, pues rompe con el perfil tradicional de la cadena.
La atención en torno a esta sede creció luego de que se difundieran imágenes y videos mostrando diferencias notables con respecto a las tiendas 3B convencionales. Usuarios en redes sociales comenzaron a llamarla “la sede más elegante”, y las reacciones no tardaron en llegar. Muchos buscaban confirmar si se trataba realmente de una tienda de bajo costo en un entorno tan exclusivo.

Un 3B que no parece 3B
Ubicada en el número 555 de la calzada General Mariano Escobedo, en la V Sección de Polanco, esta tienda se encuentra justo al lado del corporativo de la cadena, lo que explicaría su ubicación poco habitual. Desde el primer vistazo, la diferencia es evidente: una puerta de cristal automática da la bienvenida a los clientes, los acabados son modernos y el ambiente general dista mucho del de otras sucursales.
Lejos del diseño funcional y sencillo que caracteriza a las tiendas 3B, esta sede apuesta por una presentación más sofisticada, sin dejar de lado su concepto económico. La estética más pulida ha llevado a muchos a preguntarse si se trata de un nuevo modelo de tienda o una excepción pensada para un público específico.
Productos “Gourmet y Saludable”
Entre los aspectos más comentados de esta sucursal se encuentra su surtido, que va más allá de los enseres básicos a bajo precio. Una sección llamada “Gourmet y Saludable” aparece como novedad, ofreciendo productos que no se encuentran en otras tiendas de la cadena. También se han reportado artículos como relojes, joyería, productos de belleza, electrónicos y cosméticos.

A pesar de esta variedad inesperada, los precios bajos siguen siendo una constante. Esto refuerza la propuesta de valor de la marca: brindar alternativas accesibles, incluso si se encuentran en zonas donde predominan tiendas y supermercados de lujo.
Un 3B entre la gentrificación y el servicio a trabajadores
La presencia de esta tienda en Polanco también ha desatado debate. Mientras algunos ven esta sede como un ejemplo de gentrificación y pérdida de identidad de una marca popular, otros la consideran una alternativa práctica para quienes trabajan en la zona y no pueden permitirse los altos precios de otros establecimientos cercanos.
Se ha señalado que la mayoría de los clientes de esta tienda no son residentes de Polanco, sino trabajadores de la zona que aprovechan los precios accesibles durante sus jornadas laborales. Esto ha llevado a algunos a considerar la tienda como una forma de inclusión comercial dentro de un entorno donde el costo de vida es elevado.
¿Cambio de estrategia o caso aislado?
La tienda 3B en Polanco plantea interrogantes sobre el rumbo que podría tomar la cadena. ¿Se trata de una prueba piloto de un nuevo modelo? ¿O simplemente una excepción estratégica por su cercanía al corporativo? Hasta el momento, no se ha dado a conocer una postura oficial por parte de la empresa.
Lo cierto es que la presencia de esta sucursal ha generado una fuerte respuesta en redes sociales, donde miles de personas han compartido su sorpresa, sus opiniones y hasta sus visitas a la tienda para confirmar por sí mismas cómo luce y qué ofrece.
Más allá del ruido mediático, la “3B más elegante” se ha convertido en un símbolo de contraste y adaptación. Muestra que los modelos de negocio también pueden romper sus propios moldes cuando el contexto lo permite. Y aunque no todas las zonas de la CDMX verán tiendas 3B con puertas automáticas y productos gourmet, lo ocurrido en Polanco deja una lección interesante: hasta las marcas más arraigadas en lo popular pueden reinventarse, sin perder de vista su esencia.