La inteligencia artificial (IA) ha irrumpido con fuerza en el ámbito educativo, transformando tanto la manera en que los estudiantes aprenden cómo el rol de los docentes y las instituciones. Pero también ha dejado una problemática donde los estudiantes utilizan esta tecnología para realizar todas sus tareas, ante eso, se viralizó que maestros preparan regreso a clases con sellos para combatir el “Exceso de ChatGPT”.
Y es que en los últimos años, el uso de herramientas basadas en IA, desde plataformas de aprendizaje adaptativo hasta asistentes virtuales, ha provocado un cambio profundo que está redefiniendo la experiencia educativa a nivel mundial.
La integración de la IA en la educación ha facilitado la personalización del aprendizaje, permitiendo que cada estudiante avance a su propio ritmo y reciba contenidos ajustados a sus necesidades, habilidades y estilos de aprendizaje. Según un informe de HolonIQ, para 2024 el mercado global de tecnologías educativas con IA alcanzó un valor superior a los 20 mil millones de dólares, con un crecimiento anual estimado del 35 por ciento.
Un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) de 2023 destaca que solo el 42 por ciento de las escuelas públicas mexicanas cuentan con conectividad adecuada para explotar tecnologías de IA, lo que subraya la necesidad de inversiones en infraestructura.
Los sellos virales para combatir el “Exceso de ChatGPT”
En plena era digital, la IA sigue generando debates dentro del ámbito educativo. Recientemente se viralizó en la red social X un video que muestra los sellos que algunos maestros planean usar en este regreso a clases para calificar a los estudiantes que hagan uso excesivo de herramientas de IA como ChatGPT. Frases como “Sospecho uso de IA. Debe de explicar oralmente” y “Exceso de ChatGPT” aparecieron en estos sellos, reflejando una preocupación palpable entre el magisterio.
Este fenómeno no es aislado ni casual. La comunidad docente enfrenta un reto sin precedentes; cómo integrar y regular el uso de estas nuevas tecnologías que, si bien son valiosas para potenciar el aprendizaje, también generan inquietudes sobre la autenticidad del trabajo escolar y la dependencia tecnológica.
— 🇲🇽 México Mágico ✨ (@EnMexicoMagico) August 12, 2025
Un estudio reciente de la Federación Internacional de Docentes (FIDE) revela que cerca del 70 por ciento de los profesores encuestados a nivel global sienten incertidumbre sobre cómo incorporar la IA en sus métodos de enseñanza. Muchos temen que estas herramientas puedan desvalorizar su rol, al dejar que los alumnos deleguen procesos cognitivos a la tecnología sin desarrollar habilidades propias.
En México, esta percepción se refleja en cifras del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), que indican que un 65 por ciento de los docentes considera que el uso indiscriminado de IA puede generar una dependencia tecnológica entre los estudiantes, afectando la calidad y profundidad del aprendizaje. Esto ha motivado a algunos profesores a buscar estrategias para identificar cuándo un trabajo está demasiado influenciado o directamente elaborado por inteligencia artificial, y así exigir una explicación oral o un trabajo complementario.
Sin embargo, expertos en educación insisten en que la tecnología debe ser vista como un complemento, no un reemplazo de la labor docente. La clave está en la formación continua de los maestros para que puedan aprovechar las ventajas de la IA, sin perder el control pedagógico ni comprometer el desarrollo crítico y creativo de los alumnos.
La integración responsable de la inteligencia artificial puede abrir caminos hacia una educación más equitativa, personalizada y eficiente, adaptada a los desafíos del siglo XXI. Pero para lograrlo, es fundamental que la voz y el bienestar de los docentes estén en el centro de esta transformación. Sólo así se podrá construir un modelo educativo inclusivo, innovador y verdaderamente humano.