Aunque en los últimos años las redes sociales han evolucionado para convertirse en complejas plataformas comerciales y de contenido, su función principal sigue estando profundamente ligada a la conexión personal. Así lo revela el informe Digital 2025, elaborado por DataReportal en colaboración con Global Web Index, que encuestó a más de 90 mil internautas mayores de 16 años en 54 países.

Este hallazgo pone en perspectiva un hecho fundamental: pese a los algoritmos, los filtros y la creciente monetización, las redes sociales siguen siendo, en esencia, espacios para sostener relaciones humanas. En un entorno hiperconectado, el valor emocional de un mensaje directo, una videollamada o incluso una reacción en una historia sigue teniendo peso, más allá de las métricas de alcance o los likes.

Sin embargo, esa no es la única razón por la que las personas abren sus redes día a día. Un 39% admite que las usa simplemente para pasar el rato, evidenciando el papel que juegan estas plataformas como vía de escape o entretenimiento. Scroll infinito, memes, videos virales y contenido personalizado son parte del menú diario con el que millones de usuarios matan el tiempo, incluso sin un objetivo definido. Este uso pasivo pero recurrente también alimenta la economía de la atención, uno de los pilares más fuertes del entorno digital actual.

En paralelo, las redes se han consolidado como una fuente clave de información. El 34,5% de los encuestados afirmó que las utiliza para leer noticias, mientras que un 30,5% busca contenidos específicos.De hecho, Reuters ya había anticipado este fenómeno, destacando que plataformas como TikTok están ganando terreno como medio informativo, especialmente entre las generaciones más jóvenes. Este cambio plantea preguntas importantes sobre la credibilidad, la polarización y la velocidad con la que se consume la información hoy.

Por otro lado, las redes sociales también cumplen funciones más utilitarias y comerciales. Cerca del 27% de los usuarios dijo que las usa para buscar productos, y un porcentaje casi idéntico las aprovecha para encontrar inspiración sobre qué hacer o comprar. Esto confirma el rol de las plataformas como escaparate digital, donde las marcas compiten por atención con influencers, creadores y algoritmos.

Finalmente, un 23,6% de los encuestados utiliza sus redes para seguir el mundo del deporte, lo que reafirma el papel de estas plataformas como centros de comunidad y actualidad para nichos específicos.

En conjunto, estos datos revelan que las redes sociales no son monolíticas: son un ecosistema donde conviven lo íntimo con lo informativo, lo comercial con lo emocional. Y aunque cada usuario crea su propia ruta digital, la búsqueda de conexión sea con otros, con el mundo o con uno mismo parece seguir siendo el verdadero motor detrás de cada clic.

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