En el trabajo, la primera impresión es fundamental. Por si no lo sabías, formarte una imagen sobre una persona te llevará solo segundos. Así que si quieres que en tu trabajo, todos se lleven una buena impresión sobre ti, a continuación te vamos a ofrecer una serie de consejos para que logres este objetivo de la forma más fácil posible.
1.- Cuidar tu lenguaje corporal
Por si no lo sabías, la primera información que recibe alguien que te vaya a conocer proviene de tu lenguaje corporal. Por si no lo sabías, encogerte de brazos o tocarte el cuello causa una primera impresión mala.
Así que lo mejor es que te mantengas en la “postura de poder” (denominada así por la psicóloga Amy Cuddy): con los brazos o codos extendidos, la barbilla levantada y una postura expansiva.
2.- Escuchar más que hablar
Si quieres ganarte la confianza de otra persona y causarle una buena impresión, debes hacerle ver que te importa. Para ello, lo importante es tener una escucha activa, es decir: hacer preguntas, mantener el contacto visual, sonreír y, en definitiva, hacerle ver a tu interlocutor que te interesa lo que te está contando.
Nunca (y nunca es nunca) te pongas a mirar el móvil o te distraigas mientras un compañero te está contando algo.
3.- Ofrece y no pidas
Siempre debes ofrecer lo que necesita tu interlocutor. Este consejo te sirve tanto para encontrar trabajo como para cerrar un negocio. A pesar de que quieras obtener algo a cambio, debes centrarte siempre en lo que tú puedes ofrecer y que este sea el mensaje que le llega a la otra persona, que eres alguien que le puede ayudar en lo que necesita.
4.- Nunca mientas
Hay veces en las que para dar una buena impresión ocultamos información a nuestro interlocutor, exageramos nuestras habilidades o contamos mentiras. Aunque debes saber que mentir es más difícil de lo que parece.
Al mentir, solemos sentir culpa psicológica y es por eso por lo que debemos tener en cuenta que no tenemos la capacidad intelectual para administrarlo todo sin dejar que algo salga mal.
