Nada parece funcionar para la compañía especializada en producción y ventas de cámaras personales de alta definición GoPro, el miércoles pasado informó que perdió 34.5 millones de dólares en el último trimestre, después de que las ventas cayeran un 31 por ciento durante 2015.

El director ejecutivo, Nicholas Woodman, reconoció la preocupación de que GoPro no pueda expandirse más allá de su nicho de mercado y señaló que la compañía está enfocada en ayudar a hacer que las cámaras GoPro sean más fáciles de usar para los clientes existentes.

“Reconocemos la necesidad de desarrollar soluciones de software que hagan que sea más fácil para nuestros clientes descargar, tener acceso y editar su contenido GoPro”, dijo el ejecutivo a la agencia AFP.

Como parte de la estrategia de la compañía para potencializar la experiencia de usuario, el día de ayer GoPro Inc y Microsoft Technology Licensing,  filial encargada de comprar, gestionar y licenciar las patentes de Microsoft, anunciaron la firma de un acuerdo de patentes. Tras el anuncio, las acciones de ambas compañías se elevaron, GoPro tuvo un incremento del 5 por ciento, mientras que su aliada registró un incremento del 10 por ciento.

Los analistas del mercado calificaron el acuerdo como una jugada inteligente para ambas compañías. Por el lado de Microsoft tener acceso a la tecnología de las cámaras de acción le dará la posibilidad de crear nuevos dispositivos wearables o smartwatches, y continuar con su estrategia de posicionamiento. Por su parte GoPro mejorará la experiencia de usuario al beneficiarse de los nuevos desarrollos en sistemas de archivos, sin tener que depender de dispositivos externos.

Otra estrategia anunciada por el CEO de la compañía es la reducción del catalogo de productos, en el fututo sólo venderán tres cámaras: Hero 4 Black, Hero 4 Silver y Hero 4 Session. Está medida deja fuera del mercado a la Hero, la cámara más económica de GoPro con un precio de 130 dólares.

La poca accesibilidad en los precios de GoPro, deja abierto un mercado potencial para las empresas chinas Xiaomi y SJCam que ofrecen sus modelos por poco más de 70 euros.