El consumidor mexicano actual representa un verdadero reto para las marcas. Si bien es un público que valora la calidad y puede desarrollar cierto nivel de lealtad hacia los productos que elige, esa fidelidad está condicionada, casi siempre, por un factor ineludible: el precio. Así lo revela el más reciente estudio Consumers in Mexico 2025, elaborado por la reconocida plataforma de datos Statista, que dibuja con precisión los hábitos, motivaciones y contradicciones de los consumidores mexicanos.
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¿El consumidor mexicano es leal a las marcas?
La respuesta es sí, pero con matices. Según los datos de Statista, solo el 34% de los consumidores en México se considera leal a una marca específica. Esto significa que más de la mitad de los compradores están abiertos a cambiar de producto o proveedor si encuentran una oferta más atractiva o si perciben un mejor valor en su compra.
Este nivel de lealtad moderada representa un arma de doble filo para las marcas: por un lado, existe la posibilidad de captar nuevos clientes; por otro, se corre el riesgo constante de perder consumidores ante la competencia, especialmente en un mercado tan sensible al precio como el mexicano.
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Precio, el factor decisivo en México
El informe de Statista es contundente: el 82% de los mexicanos considera que el precio competitivo es el principal criterio al momento de realizar una compra. La respuesta a por qué esto ocurre así es sencilla: ante un contexto económico marcado por la inflación, la volatilidad y la incertidumbre, el bolsillo de los consumidores pesa más que nunca en sus decisiones.
A esto se suma un entorno altamente competitivo, donde las promociones, descuentos y programas de lealtad son moneda corriente en casi todos los sectores, desde los supermercados hasta el e-commerce.
Incluso categorías asociadas a productos premium, como la tecnología o los artículos de moda, muestran una alta elasticidad al precio. Los consumidores pueden aspirar a ciertas marcas, pero si encuentran un sustituto similar a menor costo, no dudan en hacer el cambio.
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¿Qué otros factores influyen en la decisión de compra?
Aunque el precio es el factor dominante, el consumidor mexicano también toma en cuenta otros aspectos al momento de comprar:
- Calidad percibida: Para el 65% de los consumidores, la calidad sigue siendo un criterio relevante, especialmente en productos como tecnología, alimentos y cuidado personal.
- Recomendaciones de familiares y amigos: El 43% de los mexicanos se guía por la opinión de su entorno cercano, lo que destaca la importancia del boca en boca y las reseñas.
- Presencia en redes sociales: Un 26% reconoce que las marcas con visibilidad en plataformas como Facebook, Instagram o TikTok tienen más probabilidades de ser consideradas.
- Sostenibilidad y responsabilidad social: Si bien solo el 19% lo menciona como factor clave, este aspecto empieza a ganar terreno, sobre todo entre los consumidores jóvenes.
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Promociones, el arma preferida para conquistar al consumidor mexicano
Las marcas que comprenden la mentalidad del consumidor mexicano saben que las promociones y descuentos son herramientas casi infalibles para atraer y retener clientes.
El estudio de Statista destaca que el 76% de los consumidores mexicanos está dispuesto a cambiar de marca si encuentra una promoción o descuento atractivo.
Las tiendas que ofrecen programas de lealtad, cashback o precios especiales tienen mayor probabilidad de captar nuevos clientes. El e-commerce ha potenciado esta tendencia, al permitir comparar precios de manera inmediata y recibir alertas de ofertas.
Esto se refleja en el auge de fechas como El Buen Fin, el Hot Sale y las promociones en plataformas como Amazon, Mercado Libre o SHEIN, donde los consumidores buscan activamente las mejores ofertas.
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Un consumidor mexicano exigente y con poder de decisión
El consumidor mexicano de 2025 es exigente, comparativo y sumamente consciente de sus opciones. Si bien puede mostrar lealtad hacia ciertas marcas, esa fidelidad está siempre condicionada al mejor precio y a la percepción de valor.
Para los mercadólogos, el desafío no es solo competir en precios, sino crear experiencias de compra atractivas, propuestas de valor claras y relaciones auténticas con los consumidores. En un entorno donde las decisiones se toman en segundos y las opciones son infinitas, las marcas que logren construir confianza, diferenciación y cercanía tendrán la ventaja.
El estudio de Statista es claro: conquistar al consumidor mexicano es posible, pero implica entender sus motivaciones, sus preocupaciones y, sobre todo, su bolsillo.
