
La Gen Z no solo compra moda; la vive, la comparte y la convierte en parte de su identidad digital. Para este grupo de consumidores, una marca “cool” no se define únicamente por el diseño de sus prendas, sino por la manera en la que conecta culturalmente, comunica en canales clave y representa valores con los que ellos se identifican.
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El estudio “Generation Z fashion worldwide” de Statista ofrece un mapa de qué hace que una marca sea atractiva para este público. Y las conclusiones son tan reveladoras como accionables para las marcas que quieren ganar relevancia en uno de los segmentos de consumo más influyentes del mundo.
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¿Qué significa que una marca sea “cool” para la Generación Z?
El concepto de “cool” para la Generación Z va mucho más allá de estar a la moda. Según Statista, se construye sobre tres pilares: conexión cultural, exclusividad de experiencias y autenticidad en valores.
En el mercado estadounidense, por ejemplo, los jóvenes identifican como factores clave para considerar a una marca “cool” en moda:
- Patrocinar eventos relevantes (55%).
- Ofrecer contenido exclusivo que no esté disponible para todos (55%).
- Lanzar colaboraciones con otras marcas o creadores (52%).
- Romper normas sociales o desafiarlas (45%).
Estos datos dejan claro que el atractivo no se genera solo en el punto de venta, sino en la capacidad de una marca para integrarse en la conversación cultural.
¿Por qué los eventos patrocinados tienen tanto peso en la percepción de marca?
El patrocinio de eventos —ya sean festivales de música, encuentros deportivos o activaciones urbanas— permite a las marcas estar presentes en momentos de alto valor emocional para el consumidor.
La Generación Z busca experiencias que pueda compartir en redes sociales, y un evento patrocinado que incluya zonas interactivas, acceso exclusivo o beneficios especiales se convierte en un escaparate para generar contenido orgánico. Esto no solo impulsa la visibilidad, sino que también crea un vínculo directo con comunidades que comparten intereses específicos.
¿Cómo influye el contenido exclusivo en la fidelización de los centennials?
El informe de Statista indica que ofrecer contenido exclusivo es tan importante como patrocinar eventos. Esto puede traducirse en:
- Lanzamientos limitados accesibles solo para miembros de un programa.
- Acceso anticipado a colecciones.
- Material detrás de cámaras (behind the scenes) que muestre el proceso creativo.
Para un público que vive conectado, la sensación de pertenecer a un círculo selecto alimenta el deseo y fortalece el engagement. Este enfoque, además, potencia estrategias de social proof cuando los consumidores comparten su acceso privilegiado en redes.
¿Qué papel juegan las colaboraciones estratégicas?
Las colaboraciones con otras marcas, diseñadores o artistas son un recurso poderoso para activar el interés de la Generación Z. El dato de Statista es contundente: el 52% considera que las colabs hacen más atractiva a una marca de moda.
Estas alianzas generan conversación mediática, permiten fusionar audiencias y aportan frescura al catálogo. Ejemplos recientes como Adidas x Gucci o Nike x Jacquemus muestran cómo las colabs bien ejecutadas pueden agotar inventarios en horas.
¿Por qué romper normas sociales atrae a este público?
Un 45% de la Generación Z en Estados Unidos afirma que le atraen las marcas que rompen con lo establecido. Este tipo de mensajes conecta con un espíritu generacional marcado por la diversidad, la inclusión y la búsqueda de nuevas narrativas.
Para las marcas, esto significa atreverse a lanzar campañas que desafíen estereotipos, abordar temas sociales o presentar colecciones que cuestionen cánones de belleza y género. No se trata de polémica gratuita, sino de autenticidad y compromiso con causas que realmente importan al público joven.
¿Cómo interactúa la Generación Z con las marcas en redes sociales?
El proceso de descubrimiento de marcas entre los jóvenes es claramente audiovisual:
- YouTube es el principal canal, con un 57% de penetración como fuente de descubrimiento.
- TikTok le sigue de cerca, con un 53%.
- Instagram mantiene relevancia con un 44%.
Este comportamiento obliga a las marcas a invertir en formatos nativos para cada plataforma y a mantener una estrategia de contenido constante, auténtica y participativa.
¿Qué errores pueden hacer que una marca pierda atractivo?
Así como hay factores que suman puntos, también hay elementos que restan:
- No ofrecer reseñas independientes sobre productos (desanima al 46% de Gen Z).
- Exceso de anuncios intrusivos (molesta al 43%).
- Promociones con presión de tiempo excesiva, que generan desconfianza (44%).
El mensaje es claro: la construcción de una marca “cool” requiere coherencia y respeto por la experiencia del usuario, evitando tácticas agresivas que erosionen la confianza.
¿Qué pueden aprender las marcas globales de estos datos?
- Integrar experiencias físicas y digitales: los eventos patrocinados pueden extenderse a comunidades online, creando continuidad.
- Diseñar contenido exclusivo como moneda de cambio: acceso anticipado o drops limitados como incentivo de fidelidad.
- Usar las colaboraciones como palanca cultural: seleccionar socios que aporten frescura y afinidad con el público.
- Adoptar una voz auténtica: romper normas sociales desde una postura genuina y no como una estrategia oportunista.
- Optimizar el canal de descubrimiento: priorizar YouTube y TikTok con formatos que fomenten la interacción.
El “cool factor” se construye, no se improvisa
La Generación Z premia a las marcas que no solo venden productos, sino que crean experiencias, cuentan historias y se involucran en causas relevantes. El “cool” no es un accidente: es el resultado de una estrategia coherente que combina cultura, comunidad y comunicación.
Las marcas que entiendan que este público busca autenticidad y participación, más que simples prendas, serán las que lideren la conversación de la moda en los próximos años.