Las políticas proteccionistas y antiinmigrantes tomadas por el presidente Donald Trump continúan surtiendo efecto en las empresas mexicanas, ahora Volaris anunció la reducción de entre 5 y 6 por ciento de su capacidad en rutas de México y Estados Unidos.

Los cambios en frecuencia serán aplicadas en las rutas Fort Lauderdale-Guadalajara, Fort Lauderdale-México, Durango-México (dejó de operar) Chihuahua-Monterrey, Guadalajara-Reynosa, México- Reynosa, Cancún- Reynosa y Oakland- Tijuana, señalaron ejecutivos de la aerolínea en su reunión con analistas.

El director de la aerolínea, Enrique Beltranena, dijo que desde febrero se comenzó a registrar dicha modificación en la oferta.

“Quitamos rutas. Volaris es eficiente en esto, cuando el mercado crece aumentamos las rutas, cuando decrece le cortamos, como en 2009 con el H1N1. Somos muy agresivos en la forma en que manejamos nuestra oferta en función de la demanda”, expuso.

Respecto a la apertura de nuevas rutas, la aerolínea ha abierto 13 en lo que va del año, que se sumarán a la meta de 250 destinos para 2020 en México, Estados Unidos, Centroamérica y Sudamérica, que se atenderán con una flota de más de 100 aviones.

Sobre la operación de Volaris Costa Rica, agregó que en los siguientes tres años, con una capacidad de hasta 22 aviones, esperan iniciar vuelos a mercados potenciales hacia Estados Unidos y Centroamérica, en mercado como Colombia, Cuba, Puerto Rico, Perú, Ecuador, entre otros.

Volaris Costa Rica inició operaciones en diciembre pasado con la ruta hacia Guatemala, en febrero comenzó a volar hacia San Salvador y el próximo 5 de abril iniciará hacia Managua.

Los nuevos lineamientos en el sistema inmigratorio de Estados Unidos han generado confusión e indignación entre la población estadounidense, ya que desde el viernes 27 de enero el presidente Donald Trump suspendió de manera temporal la entrada de refugiados y ciudadanos de siete países musulmanes.

Las órdenes ejecutivas inmigratorias firmadas por Donald Trump el 25 de enero pusieron en riesgo inmediato de deportación a 11 millones de indocumentados que se estima viven en ese país.

El 28 de enero, una jueza suspendió la deportación de refugiados y personas que habían llegado al país con visa y que quedaron detenidos en aeropuertos debido a la orden ejecutiva.

Sin embargo, el gobierno estadounidense respondió con un nuevo veto que prohíbe el ingreso de los refugiados durante 120 días y la entrega de visados durante 90 días a ciudadanos de Irán, Libia, Siria, Somalia, Sudán y Yemen.

Actualmente esta orden se encontró con su primer obstáculo judicial, luego de que un juez federal suspendió provisionalmente la medida en favor de la esposa e hijo de un refugiado sirio en Estados Unidos.