Después de las acusaciones de que la Casa Blanca enfrenta una crisis por filtraciones a los medios sobre que el yerno del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, estaba bajo investigación por crear un puente de comunicación secreto con Rusia, ahora el mandatario quiere evitar que se filtren informaciones a los medios.
De acuerdo con un análisis de Bloomberg, Trump ahora está revisando a su personal de la Casa Blanca, ya que busca despedir a personal que haga filtraciones, así como a quienes no haya considerado “capaces” de detener el impacto de la información filtrada, ni sus reacciones.
Y es que al parecer, a Trump le enfureció que su viaje a Europa se viera ensombrecido por los informes sobre la interferencia de Rusia en la política interna de Estados Unidos, e incluso calificó las noticias desde su cuenta de Twitter como “fake news” y alegó que muchas fugas de información que salen de la Casa Blanca “son falsas o no existen”.
Por el momento, Trump ya integró a un abogado a la Casa Blanca, Marc Kasowitz, quien ayudará al presidente a asumir las investigaciones, pues se prevé que el presidente siga los pasos de la estrategia que hizo Clinton en su momento, crear grupos de investigaciones y medios para que ninguna información se filtre, así como el manejo en la toma de decisiones.
Entre las decisiones que debe tomar Trump es si el Pentágono debe enviar o no más tropas estadounidenses a Afganistán, encontrar a un nuevo director del FBI, entre otros grandes cambios.
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