Según Greenpeace, greenwashing es “el acto de confundir a los consumidores en relación con las prácticas medioambientales de una compañía o los beneficios que tiene para el medio ambiente un producto o servicio”. Desde la óptica de las PR, implicaría apoyar reportes de sostenibilidad poco sólidos y, desde el punto de vista del marketing, significa etiquetados engañosos.