Habitualmente cuando una marca escoge a un embajador dentro del mundo deportivo, se tiende a elegir a algún deportista de élite como Cristiano Ronaldo, Lionel Messi, LeBron James o Lewis Hamilton; sin embargo, también existen ocasiones en las que los jugadores no son los personajes ideales para transmitir la personalidad de la marca y se opta por otras figuras del ámbito con otro perfil como son los directores técnicos