El presidente Barack Obama sigue conservando el magnetismo que su marca personal adquirió durante sus dos administraciones presidenciales en Estados Unidos y ahora es un poderoso influencer con impacto no solo en redes sociales, sino en la agenda de su país.
Lo último es en alusión a la presentación de un centro en Chicago, esto como parte de su fundación que opera en conjunto con Michelle Obama.
Ha sido esta pareja la sensación una fórmula con gran impacto en el mercado de medios, logrando con ello una especie de efecto en la agenda política.
Pensemos en lo que ocurre con el mensaje de cumpleaños que el mandatario envió a la exprimera dama con motivo de su cumpleaños.
“No solo eres mi esposa y la madre de mis hijos, eres mi mejor amiga. Amo tu fuerza, tu gracia y tu determinación. Y te quiero más cada día. Feliz cumpleaños”, cita el mensaje que Obama dedicó a su esposa, logrando viralizarse con más de tres millones 346 mil me gusta en Instagram.
Las estrategias de personal branding que hay detrás de personalidades políticas siempre han ocurrido en función de lograr impactar a audiencias, ciudadanos o segmentos sumamente específicos de mercado, pues no es lo mismo el expresidente Obama que promueve las instalaciones de su fundación con un centro de vanguardia, que una Oprah Winfrey que podría estar aspirando a una candidatura presidencial o un exmandatario que participa como conferencista con gran impacto en temas políticos.
