- Recursos Humanos ya había aprobado la contratación de María para trabajar como secretaria administrativa.
- Un día antes de presentarse, por WhatsApp, el futuro jefe le dijo que no fuera y le explicó la razones.
- “Vi tu estado ‘Ni una menos’, sos pañuelo verde e ibas a venir a un ambiente muy machista. No te presentes”.
Una mujer de nombre María hizo una denuncia a través de las redes en relación con una contrataciòn para un empeo que se frustró porque, según relató, es “feminista”.
Dice que no la tomaron en una concesionaria de automóviles de Argentina a un día de empezar a trabajar porque quien iba ser su jefe stalkeó su estado de Whatsapp.
El día anterior a que se presentará por primera vez al trabajo, el hombre le dijo que no fuera porque se iba a meter en “un ambiente muy machista”.
“María, hola. Disculpame, pero te seré honesto. Vi tu estado “Ni una menos”, sos pañuelo verde [así dijo exactamente] e ibas a venir a un ambiente muy machista (concesionaria de autos). Ahí los muchachos hacen chistes que ustedes siempre toman muy susceptiblemente, todo para el carajo”.
Ese es el comienzo del mensaje que la mujer recibió por WhatsApp un día antes de que debiera presentarse a trabajar y que fue publicado por TN.
Entrevista de trabajo exitosa se frustra por ser “pañuelo verde”
María había tenido una entrevista de trabajo que resultó con éxito y fue escogida entre muchas otras mujeres para el puesto de secretaria administrativa.
Sin embargo, aunque los responsables de recursos humanos la creyeron apta para el trabajo, quien iba a ser su jefe, opinó otra cosa luego de ver su estado de WhatsApp.
Así le siguió explicando el porqué de la decisión:
“Si decimos ‘buen día’, ustedes creen y piensan ‘me quiere culear’. Si decimos ‘en qué la puedo ayudar’, ustedes piensan ‘éste es un abusador’. Entonces prefiero buscar otro estilo de mujer, lo que sería para ustedes ‘una oprimida por el patriarcado’”, amplió el sujeto.
¿La mejor decisión o la más simple?
Al final, antes de aclararle que no comenzaría a trabajar al otro día, quién iba a ser su jefe le pidió disculpas y le explicó que creía que había tomado la mejor decisión para evitar futuros problemas.
“Perdona, pero sé evitar futuros conflictos y hacerte pasar futuros disgustos por estos chicos que tengo, a quienes seguramente sientas como opresores machistas”, finalizó.
Sin dudas, quien iba a ser el jefe escogió el camino más simple. En lugar de capacitar a los trabajadores hombres en cuestiones de género y solicitarles que respeten los pensamientos y sentimientos de su nueva compañera, le dijo a ella que no sea parte del equipo.
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