Una investigación realizada este año en España revela que casi el 66 por ciento de los españoles tiene una extraña afección: ansiedad por quedarse sin batería en los smartphones.

Así es, casi siete de cada 10 de los encuestados dijo que le preocupa que las líneas que marcan la energía restante en su teléfono móvil llegue a cero y quedar desconectado.

La preocupación es tanta que algunos la califican como una ansiedad comparable con otras afecciones de este tipo, al borde del ataque de pánico.

El problema no es nuevo, aunque viene creciendo con el paso del tiempo.

Una investigación de hace casi un lustro, en este caso de Ebiquity en los Estados Unidos, decía que un grupo de encuestados afirmó sentir pánico cuando su batería marcaba menos del 20 por ciento. Es más, el 40 por ciento de los afectados aseguraba tener más de tres cargadores y, el 80 por ciento, dijo que cargaba su teléfono antes de salir de sus casas, incluso aunque no hiciera falta.

Los datos son más que claros: si una compañía quiere que sus teléfonos sean los más elegidos en el futuro, sus baterías deben durar más tiempo.

Más aún en verano, cuando todo indica que el mayor uso de las redes sociales genera un mayor consumo de móviles y, en consecuencia, más gasto de energía.

El primer estudio mencionado arriba fue llevado adelante por la plataforma Toluna Start y financiado por Oppo, la compañía China fabricante de teléfonos que busca ganar market share en occidente.

Esa investigación dice que sólo al cinco por ciento de los más de 1.500 españoles consultados no les produce ninguna sensación negativa que los smartphones se queden sin batería fuera de sus casas.

A un grupo de estos, el 30 por ciento, sí les importa únicamente si están esperando alguna comunicación importante o han pedido un Uber.

La investigación discrimina por “líneas de batería”. Por ejemplo:

• Un 50 por ciento de los encuestados temen quedarse con menos del 20 por ciento de energía.
• Un 50 por ciento dijo cargar los teléfonos todos los días.
• Un 35 por ciento sólo los carga cuando el teléfono avisa que tiene “batería baja”.
• Uno de cada 10, carga los smartphones cuando la batería llega al 5 por ciento.
• Un 3 por ciento, cuando queda menos del 3 por ciento de batería.
• Un 1 por ciento carga cuando se apaga el móvil.
• Un 1 por ciento también dijo que no presta atención porque utilizan algún sistema de carga ultrarrápida.

Más datos del uso de smartphones referidos al estudio en España

• La mitad sale de sus casas con los smartphones cargados al 100 por ciento si saben que van a estar largo tiempo afuera.
• De estos, el 24 por ciento lleva una batería externa, el 20 por ciento activa el modo ahorro de batería, el 9 por ciento lleva otros dispositivos para hacer “carga reversible” y el 7 por ciento dice que activa y desactiva el modo avión .
• Por otra parte, el 23 por ciento de los españoles dice que “siempre” tienen un cargador extra en su bolso y el 35 por ciento que tienen uno en el auto.
• Casi tres de cada 10 dice tener un cargador en el trabajo y 9 de cada, en sus casas.
• ¿Qué cargador usan? La mitad, solo el original de la marca, un 15 por ciento usa cualquiera (si bien dicen que “está mal”), otro 10 por ciento usa cualquiera (y no les importa), el 3 por ciento utiliza carga inalámbrica y algunos pocos un cable USB. Un 10 por ciento dice utilizar sistemas de carga carga ultrarrápida.

En definitiva, si las marcas tienen en cuenta estos datos, lo más lógico es que apunten todos los cañones del I+D hacia el diseño de dispositivos con baterías de rendimiento prolongado o, en su defecto, hacia un sistema de carga superrápida.