Internacional.- Dentro del mundo del deporte existen (en cualquier latitud del globo terráqueo) rivalidades que llevan a otro nivel la pasión de los aficionados, situación que representa una gran oportunidad de marketing, misma que muchas marcas alrededor del mundo han decidido aprovechar de diferentes maneras.

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Una de las maneras más ‘fáciles’ de asegurar presencia dentro de este tipo de partidos es a través de un patrocinio deportivo con todos los involucrados en la rivalidad, ejemplos de lo anterior son Bimbo en México (América-Chivas) o BBVA Francés en Argentina (Boca Juniors-River Plate).

Cabe destacar que el punto anterior no sólo aplica para los patrocinadores de playera, sino también para los sponsors técnicos, quienes aseguran su presencia dentro de estos juegos de gran envergadura al vestir a los dos equipos rivales, así lo hacen Nike en la Premier League inglesa (Manchester United-Manchester City) o Adidas en Brasil (Flamengo-Fluminense).

Y si bien las dos maneras anteriores resultan bastante efectivas para las marcas involucradas, en los Estados Unidos está surgiendo una nueva forma de hacerlo que consiste en patrocinar directamente la rivalidad, tal y como lo hará a partir de este 2014 BMW con la rivalidad entre UCLA y USC.

A través de una acuerdo alcanzado entre Southern California BMW Centers y las universidades antes mencionadas, la marca automotriz alemana se ha convertido en el patrocinador de todas las competencias entre ambos colegios, mismas que a partir de ahora recibirán el nombre de The SoCal BMW Crosstown Gauntlet.

Una interesante forma de explotar un evento deportivo que podría generar dividendos bastante buenos en otras latitudes, sólo hace falta pensar en algo como el “Clásico Nacional Comex”  o algo por el estilo.