Tras la venta de la firma de lujo Versace a Michael Kors por 2 mil 120 millones de dólares; el segmento de las marcas de lujo globales e independientes queda cada vez más con menos jugadores. Desde grandes empresas como Dior y Gucci, hasta Yves Saint Laurent, encontraron refugio bajo los conglomerados de lujo como Kering o LVMH, según un artículo de Bloomberg.

De tal modo que, según el medio, Michael Kors y sus competidoras Tapestry, Shandong Ruyi y Fosun International, buscan initar la táctica multimarca de los gigantes europeos, esto pese a que el sector se reduce en el número de objetivos posibles.

Es por ello que el medio elaboró una lista de aquellas marcas de lujo que han evitado a inversores financieros o magnates de lujo y que transformarían cualquier cartera.

Chanel

Fundada por Coco Chanel, con Karl Lagerfeld de director creativo; a pesar de que se trata de una compañía de capital cerrado se ha vuelto más transparente al informar métricas financieras, entre ellas ventas por 9 mil 600 millones de dólares durante 2017.

Bloomberg refieren que los candidatos a adquirirla enfrentan un desafío formidable: los hermanos Alain y Gérard Wertheimer, no han manifestado ninguna intención de venderla. Por el contrario, en junio pasado, la empresa afirmó que desea mantener su independencia y concentrarse en el largo plazo.

Giorgio Armani

El hombre detrás de la empresa homónima está en el negocio hace más de cuatro décadas. Armani fue la punta de lanza de la expansión de las marcas de lujo a nuevos campos al incorporar de todo, desde jeans hasta muebles para el hogar.

Armani indicó que mientras viva, no cederá el control de su imperio de la moda, que registró ventas por alrededor de 2 mil 500 millones de euros (2 mil 900 millones de dólares) en 2016. Pero han sido años más duros para él, que está achicando su línea de marcas ante un declive de las ventas.

Prada

Tras pasar algunos años estancada, Prada volvió a encarrilarse a los diseños, chics y feos, los cuales hicieron ganar seguidores fieles a Miuccia Prada, la directora creativa, accionista mayoritaria y una de las máximas ejecutivas, y transformó a Prada en una empresa de 3 mil 500 millones de dólares.

Nicho

Además de las potencias globales, existen algunas marcas familiares con atractivo de nicho. Etro, con sus diseños psicodélicos de estampados de cachemir, sigue en manos de una familia; al tiempo que Missoni, conocida por sus tejidos coloridos, vendió su participación minoritaria al estatal Fondo Strategico Italiano este año.

Por su parte, Brunello Cucinelli, empresa de capital abierto de Perugia tiene un valor de mercado de 2 mil 300 millones de euros.