• De acuerdo con Fortunly, solo en Estados Unidos se invierten más de 1.1 billones de dólares en gastos decembrinos

• Para el 42 por ciento de las familias, la compra de regalos y artículos para Navidad empieza desde el primero de noviembre

• Tiendas departamentales y ecommerce son los tipos de negocios favoritos para los compradores en esta época

Como prácticamente todos los años, esta temporada de fiestas decembrinas ha probado ser muy beneficiosa para los negocios. El consumo de vino, como otras bebidas alcohólicas, se disparó la pasada Navidad y se espera genere también una importante derrama en Año Nuevo. Los consumidores mexicanos son además los que más incrementarán su gasto en las fechas, según estudios de Unruly. Por supuesto, existe una alta inversión en cenas y regalos varios.

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Por supuesto, no todas las empresas crecen igual. Forbes cree que empresas como Amazon, PayPal y FedEx tienen, previsiblemente, una temporada muy benéfica para sus ganancias. Por su parte, Listverse asegura que marcas de aerolíneas, restaurantes y videojuegos tienen también unas excelentes fiestas decembrinas. Con el primero de enero de 2020 tan cerca, Clip apunta que cuatro tipos de negocios se verán muy beneficiados en México con el Año Nuevo:

Gimnasios: Negocios al frente de la lista de propósitos

Las fiestas de finales del año siempre se caracterizan por ser una época de celebración y para reunirse con amigos y familia. Lo anterior significa, casi invariablemente, que las personas se llenan de alimentos mucho más de lo necesario en estos días. Dentro de México la situación es todavía más grave, debido a la presencia de las distintas fechas que constituyen al infame Maratón Guadalupe-Reyes. Por eso los gimnasios son negocios tan populares en Año Nuevo.

Muchas personas se deciden, como parte de sus propósitos, ir más al gym y tratar de tener la forma ideal para las vacaciones de verano. Así que estos negocios tendrán invariablemente un aumento en la cantidad de membresías y usuarios el próximo enero. Sin embargo, la tasa de abandono también ha sido históricamente muy alta. En los próximos días, las empresas se tendrán que poner las pilas para reforzar sus estrategias de retención de clientes a largo plazo.

Nutriólogos: Una forma distinta de ponerse en forma

Junto con los gimnasios, estos negocios son también muy solicitados después de Año Nuevo para ayudar a la gente a recuperar la figura. También tienen una importante tasa de abandono conforme avanzan las semanas. Su ventaja es que, contrario de los centros de entrenamiento, no se requiere una inversión de tiempo o esfuerzo físico tan grande para seguir en tratamiento. Por lo tanto, el reto de mantener clientes recurrentes no es igual de difícil que su contraparte.

Sin embargo, sí tendrán que trabajar para asegurar la lealtad de los usuarios en el largo plazo. Para convencer de mantenerse en el tratamiento, tendrán que asegurarse de ofrecer planes saludables que no rompan demasiado con sus actividades diarias. Asimismo, podrían recurrir a planes de servicios conjuntos con otros negocios. Por ejemplo, aliarse con otros gimnasios para ofrecer sesiones gratuitas de ejercicio. O en viceversa, citas con nutriólogos regulares.

Establecimientos de belleza: Negocios que facilitan el “nuevo año, nuevo yo”

Finalmente, otras empresas y marcas que podrían tener un aumento en la cantidad de clientes que reciben están spas, salones de maquillaje, estéticas, lugares de depilación, etcétera. Este tipo de negocios también ayudan a que la gente consume una nueva imagen después del Año Nuevo. Como no se trata de compañías donde se requiera una suscripción o membresía tan continua, como nutriólogos o gimnasios, sus retos para la retención de clientes son otros.

Concretamente, estos negocios tienen que aprender a generar una lealtad de marca. Como sus servicios son más esporádicos, deben asegurarse que las personas continúen acudiendo en el largo plazo. Por ejemplo, ofreciendo recompensas de consumidores frecuentes, desde descuentos hasta tratamientos sencillos gratuitos después de cierto gasto. Por supuesto, no se puede despreciar la inversión en mejorar la experiencia al cliente para hacerla más atractiva.