Antes que Google presentara al mundo a Pixel, su smartphone de fabricación propia con el que buscará competir en el mercado móvil, ya conocíamos al Nexus 5X y Nexus 6P, fabricados por LG y Huawei, respectivamente.
Sin embargo, con la llegada del nuevo dispositivo de la compañía de Mountain View, California, se dejaron de producir los otros dos modelos y, al parecer, dejarán de dar soporte a los que ya están en manos de miles de usuarios.
Lo anterior debido a que LG está ofreciendo a los dueños de dispositivos Nexus 5X la devolución de su dinero, esto a causa de que muchos reportan problemas con el hardware y software.
De acuerdo con el sitio Gizmodo, el problema puede ser que hasta antes que lanzaran a Pixel, los Nexus eran los primeros teléfonos en actualizar a las últimas versiones de Android. Pero recientemente, al intentar instalar Nougat, empezaron a reportar fallas en algunos los dispositivos del modelo 5x.
El problema, según reportes de los foros de soporte de Google, no es de software (aunque parezca) sino del hardware, pero no se puede solucionar desde la compañía, por lo que los afectados tienen que enviarlo al servicio técnico de LG, compañía que, al verse imposibilitada de solucionar el problema (porque ya no se fabrican piezas para los Nexus), decidió ofrecerles la devolución de su dinero.
Aunque el problema no es originado por alguna falla de la marca surcoreana, sino por la tecnológica de Estados Unidos, su reacción fue ofrecer una solución a sus clientes. Aunque la cantidad de dispositivos vendidos es mucho menor, esta falla recuerda a las que enfrentaron las marcas líderes del mercado de smartphones: Apple y Samsung.
La compañía de Cupertino tuvo que anunciar dos veces en una semana, programas globales de reparación para los iPhone 6S; el primero fue anunciado la semana pasada a causa de una falla en la pantalla al no responder correctamente al tacto, mientras que el segundo el lunes pasado, debido a un problema con las baterías.
A su vez, Samsung trata de superar la crisis que enfrentó por las fallas en la batería del Galaxy Note 7, que provocó el llamado de 2.5 millones de dispositivos y podría representar pérdidas por más de 5 mil millones de dólares.
Imagen: Twitter/@gabriellejdj36