Montevideo, Uruguay.- Mientras los restos del escritor y periodista Eduardo Galeano fueron velados este martes en el Palacio Legislativo de Montevideo, qué mejor forma de recordarlo que con sus imperdibles palabras sobre el deporte que más amaba: el fútbol.

Notas relacionadas:
Murió Galeano: lo recordamos en 10 frases inolvidables
Novelistik ofrece una oportunidad para los escritores sin editorial
Gabriel García Márquez y otros escritores que pisaron el mundo de la publicidad

En el mismo Salón de los Pasos Perdidos del Parlamento, donde se le rindieron honores a personalidades de la cultura uruguaya como el escritor Mario Benedetti (fallecido en 2009) y el artista plástico Carlos Páez Vilaró (muerto en 2014), fue velado este martes el escritor Eduardo Galeano.

Para homenajearlo, qué mejor manera que recordar una de sus aristas más interesantes y de una creatividad innata: sus frases sobre fútbol, recopiladas por la BBC.

La frase más repetida ▼

“En su vida, un hombre puede cambiar de mujer, de partido político o de religión, pero no puede cambiar de equipo de fútbol”.

Jugué muy bien… mientras dormía ▼

“Siempre jugué muy bien, la verdad maravillosamente bien. Era el mejor de todos, pero sólo de noche mientras dormía. Durante el día, hay que reconocerlo, he sido el peor pata de palo que se ha visto en los campitos de mi país”.

Sobre el Maracanazo (2-1 a Brasil en 1950) ▼

“Prometí a Dios una cantidad de sacrificios a cambio de que Él se apareciera en Maracaná y diera vuelta el partido. Nunca conseguí recordar las muchas cosas que había prometido, y por eso nunca pude cumplirlas”.

Qué tiene que ver Dios ▼

“¿En qué se parece el fútbol a Dios? En la devoción que le tienen muchos creyentes y en la desconfianza que le tienen muchos intelectuales”.

Gente ▼

“No hay nada menos vacío que un estadio vacío. No hay nada menos mudo que las gradas sin nadie”.

Messi y Neymar ▼

“Los niños no tienen la finalidad de la victoria, quieren apenas divertirse. Por eso, cuando surgen excepciones, como Messi y Neymar, son, entonces ellos, para mí unos verdaderos milagros”.

Buen fútbol ▼

“Yo no soy más que un mendigo de buen fútbol. Voy por el mundo, sombrero en mano, y en los estadios suplico una linda jugadita por amor de Dios. Y cuando el buen fútbol ocurre, agradezco el milagro sin que me importe un rábano cuál es el club o el país que me lo ofrece”.

Religión ▼

“El fútbol es la única religión que no tiene ateos”.

Fútbol versus negocio ▼

“El juego se ha convertido en espectáculo, con pocos protagonistas y muchos espectadores, fútbol para mirar, y el espectáculo se ha convertido en uno de los negocios más lucrativos del mundo, que no se organiza para jugar sino para impedir que se juegue”.

Al manicomio ▼

“El fanático es el hincha en el manicomio. La manía de negar la evidencia ha terminado por echar a pique a la razón y a cuanta cosa se le parezca, y a la deriva navegan los restos del naufragio en estas aguas hirvientes, siempre alborotadas por la furia sin tregua”.

Como en el amor ▼

“Y yo me quedo con esa melancolía irremediable que todos sentimos después del amor y al fin del partido”.