Con la caída de las tasas de natalidad y el aumento de la esperanza de vida, el grupo demográfico de mayor edad está creciendo rápidamente en proporción de la población mundial, creando importantes oportunidades comerciales y desafíos, además de dar lugar a nuevas tendencias sociales, económicas y de consumo, afirma el reciente estudio de Euromonitor sobre el futuro del segmento de mayor edad de la sociedad.

Información sobre las tendencias y los problemas provocados por el envejecimiento de la población, incluido el impacto del coronavirus, puede ayudar a las empresas a formular estrategias para mantenerse rentables y relevantes en el largo plazo.

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, la población mundial de 60 años o más abarcará a más de uno de cada cinco seres humanos a mediados de siglo, pasando a 2,1 mil millones en 2050. De bote pronto, uno piensa en el costo que esto significaría para el Estado, pero, en términos de economía y mercado, se abre una veta muy interesante.

El aumento de la longevidad ha estimulado un crecimiento económico sin precedentes y nuevas oportunidades para la realización personal. Las personas mayores son generalmente más saludables que sus contrapartes en las generaciones pasadas, y buscan permanecer comprometidos y relevantes el mayor tiempo posible. Los avances en biociencia ofrecen la posibilidad de vidas aún más largas, saludables y activas.

El envejecimiento de la población es un cambio demográfico importante en todo el mundo, impulsado por el aumento de la expectativa de vida y la disminución de las tasas de natalidad, junto con otras fuerzas impulsoras importantes, como desarrollo tecnológico y cambio climático. El envejecimiento de la población continuará dando forma al mundo en que vivimos, lo que impulsará a las economías, sociedades y empresas a adaptarse.

De acuerdo al informe del Foro Económico Mundial, titulado Cómo la longevidad del siglo XXI puede crear mercados e impulsar el crecimiento económico, las empresas, tanto grandes como pequeñas, han comenzado a utilizar el envejecimiento como una lente a través de la cual observan sus planes estratégicos: “Como tal, el envejecimiento se convierte en una oportunidad comercial que alimenta los resultados finales, alienta el cambio en el lugar de trabajo y la fuerza laboral que puede impulsar la productividad, y proporcionar un vehículo para apoyar el valor compartido y las asociaciones sostenibles con el gobierno y la sociedad civil“.

Las empresas se están preparando para la nueva ola de consumidores mayores. Hoy, tanto el segmento de los baby boomers como los adultos mayores cuentan con más recursos y salud que nunca. A diferencia de la generación que alcanzó la mayoría de edad durante la II Guerra Mundial, los baby boomers que ahora ingresan a la edad de jubilación han experimentado un empleo estable y a largo plazo, por lo que su poder adquisitivo es mejor.

La economía plateada (silver economy) como le llaman algunos, “está rediseñando las líneas económicas, cambiando la cara de la fuerza laboral, avanzando la tecnología y las innovaciones, y echando abajo las percepciones de lo que significa envejecer”, afirma una publicación de AARP. A nivel mundial, se prevé que la población de más de 65 años tenga un promedio de ingreso bruto de USD21,811 en 2040, un aumento del 38% sobre 2020 en precios constantes de 2019. Las oportunidades apenas inician.

El sector salud sería el ejemplo más obvio de como este segmento está impactando en su desarrollo. Una serie de nuevas ofertas en biotecnología, dispositivos, productos farmacéuticos y servicios de atención dirigida están orientados a los consumidores de mayor edad. Vivienda, transporte, entretenimiento, comida y bebidas alcohólicas, son otros de los sectores en que se están beneficiando por esta tendencia.

El segmento de plata es hoy el segmento dorado. Servicios financieros, casas inteligentes, cursos y educación en línea, viajes, alimentos, servicios y un sinfín de productos prácticos e innovadores, están haciendo fila, porque sin duda. Si hay algo que este mercado estimula, es la innovación.

Atender esta veta demográfica será un elemento crucial para el crecimiento de muchas empresas en el futuro. La inversión en productos y servicios dedicados resultará lucrativa para las marcas que se acercan a los más veteranos. Las empresas ya no pueden ignorar el envejecimiento global en su plan estratégico, deben integrar esta demografía a su planificación de productos, servicios y empleo.