Internacional.- Hugh Hefner debe ser el hombre más envidiado del mundo, por algunos. Fundador y editor, hasta el día de hoy, de la Revista Playboy, a punto de cumplir los 89 años, vive rodeado de mujeres, en una Mansión de ensueño, con fiestas frecuentes y una libertad absoluta. Su nombre en sí es una marca y es uno de los pocos magnates que han elegido una forma de vida rupturista que se convirtió en un sueño real para hombres y mujeres. Pero ¿cómo lleva esa historia uno de sus hijos?

La revista para hombres es un fetiche mundial y dio a su creador una fortuna inconmensurable, con la publicidad de las mejores marcas, muchas de las cuales han formado parte posteriormente del soporte para televisión y otros medios. Con todas las posibilidades económicas a su alcance, Hefner ha vivido en una especie de burbuja que se extiende al lugar donde viaje con sus conejitas. Pero no sólo ha sido aprovechada por él, sino también por sus hijos.

En una entrevista dada a Bussiness Insider, Cooper Hefner habla de su infancia y muy por el contrario a lo que se pudiese pensar, el joven de 23 años dice que llevó una vida “normal” como cualquier chico de su edad, en un “hogar que fue para nosotros como un hogar bastante tradicional, aunque no era tradicional”, con la salvedad de tener un zoológico de animales exóticos en casa y una serie de espacios lúdicos basados en películas infantiles.

Cooper cuenta, en la entrevista, que tenía prohibido acercarse a las fiestas de su padre, pero que más de alguna oportunidad, junto a sus amigos adolescentes, logró fisgonear un poco, como lo haría cualquier chico de su edad. Una historia curiosa que la publicación devela por medio de un video-tour que compartimos con ustedes.

Sin duda que este es el emprendimiento más conocido del mundo, pero también más arriesgado y misterioso. ¿Nos damos una vuelta por la mansión?