Voz quebrada y a veces, voz que desaparece por completo; manos rasgando la cara, el cuello, cabello y accesorios; piernas temblorosas; mentes que se bloquean; sudoración excesiva, vómito, miradas fijadas al techo, al piso, al papel y expresiones que transmiten un “quiero salir corriendo de aquí inmediatamente” son algunas reacciones que me han tocado ver de cerca en ejecutivos de diversos niveles.

Me gusta poner atención en las habilidades y debilidades que tienen las personas al hablar en público; ya que es una de mis especialidades a nivel académico y laboral.

El saber hablar en público ha sido, es y seguirá siendo indispensable para poder alcanzar un buen desarrollo personal y profesional a nivel individual y de equipo. Esta competencia ayuda a vender más, cerrar mejores alianzas, fortalecer equipos de trabajo, colaborar adecuadamente, cumplir retos y metas, sentir mayor autoestima, entre muchas ventajas más.

Hablar en público no solo se refiere a pararse en un escenario ante un gran público; puede ser incluso en una reunión muy pequeña.

El arte de hablar en público integral lenguaje verbal y no verbal, manejo de los nervios, actuación, procesos adecuados de pensamiento, niveles altos de empatía y concentración, entre muchos otros factores.

La Glosofobia es el término que se refiere a la fobia de hablar en público; según datos de un artículo de médicosypacientes.com, lo sufre un 75% de la población mundial. Es entendible el por qué tantas personas que son forzadas por temas laborales a hablar en frente de grupos de personas se sienten temerosas y amenazadas. Esta cifra también nos demuestra el porqué tanta gente prefiere quedarse callada en juntas y en reuniones, teniendo como consecuencia juntas aburridas, poco proactivas y carentes de contenido.

Si eres de las personas que sienten ansiedad al hablar en público, es algo muy común; la buena noticia es que a través de entrenamientos y coaching adecuado, se puede superar ya que es una lastima no poder compartir tus ideas y conocimientos con otras personas.

En realidad, puedes saber mucho sobre uno o varios temas, pero si no los expresas; nadie lo sabrá. Evadir es una salida a corto plazo, pero que tendrá efectos negativos a mediano y a largo plazo. El hablar en público es un atributo crucial en el campo profesional de cualquier industria.

Todos los seres humanos tenemos la capacidad de mejorar las habilidades de hablar en público; hablar en público puede pasar de ser tu peor pesadilla a ser algo que disfrutas.

Mejorar tus habilidades de hablar en público no es magia, es una transformación que lleva tiempo y que se logra a través de la práctica. Superar cualquier miedo siempre nos brinda grandes satisfacciones y empoderamiento.

Estudios realizados por la Universidad de North Carolina y el Statesman Debate Institute, han encontrado que participar en programas de Public Speaking permite que las personas se sientan más confiados de vencer su miedo, y de esta manera colaborar con sus colegas y transmitir ideas de manera proactiva y persuasiva.

Ya sea que hablemos de manera presencial o virtual, la credibilidad es esencial, por lo que te recomiendo ampliamente darte el tiempo de mejorar tus habilidades de orador.