Las redes sociales revolucionaron la dinámica de comunicación y la forma de tener interacción tanto entre usuarios como de las marcas con el consumidor, esto en gran medida a que son escenarios donde la gente tiene mayor poder para expresar su sentimiento respecto cualquier tipo de situación.
Actualmente se estima que existen más de 3 mil millones de usuarios de redes sociales en todo el mundo, donde destacan Facebook (más de 1.8 mil millones), WhatsApp y Facebook Messenger (más de mil millones cada una), Instagram (600 millones) y Twitter (con 317 millones).
Sin embargo, si bien las redes sociales son un gran escenario para que los usuarios se comuniquen y para que las marcas contacten con sus públicos, también lo es que en muchas ocasiones son usadas par generar violencia, publicando mensajes de odio y agrediendo directamente a otras personas.
A principios de este año, cobró relevancia en los medios el caso de una niña de 12 años de edad que transmitió a través de Facebook Live como se quitaba la vida el pasado 30 de diciembre. El hecho cobró gran viralidad no solo en redes, también en los propios medios que difundieron las imágenes.
Las críticas se hicieron extensas a la red de Mark Zuckerber por tardar dos semanas en eliminar dicho video, algo que por ejemplo no ha sucedido en otros casos en los que incluso se le ha acusado de censura.
Algo similar sucede en Twitter, donde el tema del bullying o acoso también ha preocupado mucho por su propagación entre diversos usuarios.
Esto ha motivado a ambas copañías a emprender acciones. Por un lado Facebook anunció tres iniciativas que incluyen herramientas de prevención en tiempo real, como un chat en vivo con organizaciones de ayuda a través de Messenger y la asistencia y reportes de posibles suicidios.
Para ello, hizo alianza con diversas organizaciones, como Crisis Text Line, National Eating Disorder Association y el National Suicide Prevention Lifeline.
En tanto, Twitter también anunció nuevas funciones que permitirán a los usuarios bloquear algunos perfiles o comentarios que incluyan palabras claves predefinidas. Esto gracias a un nuevo algoritmo creado par aidenteificar comportamientos ‘maliciosos’, como enviar tuits a otros usuarios sin que estos lo hayan solicitado. Además de que hay nuevos filtros como cuentas como ‘huevo’ o ‘fantasma’.
La evolución de este tipo de plataformas han permitido ya no sólo intercambiar mensajes de texto (públicos y probados) y fotografías, ahora también es posible el compartir videos, incluso en live streaming. Esto dota de gran poder a las personas que, si bien generalmente es usado para publicar acciones cotidianas, en otras sirve para generar violencia en este tipo de plataformas.
Esto supone un riesgo que las redes no quieren obviar, por lo que han emprendido acciones con la finalidad de evitar y ayudar a los usuarios a protegerse.
