Internacional.- Normalmente los productos edición limitada tienen la intención de reactivar las ventas de una marca en periodos de bajo consumo, ofreciendo un artículo que posee varías de las características que conoce y disfruta, más algunas otras que lo convierten en algo novedoso y ‘necesario’ de obtener, pues como su nombre lo indica sólo estarán disponibles por un tiempo limitado; sin embargo, cómo debe de actuar una marca cuando estos productos superan el éxito esperado. ¿Debe éste convertirse en un producto regular o quedar en el olvido como era la intención original?

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Hace un par de meses la firma estadounidense Dunkin’ Donuts, la cual regresará al mercado mexicano dentro de poco, introdujo en el mercado estadounidense un nuevo producto denominado Croissant Donut, el cual originalmente estaba planeado para existir de manera momentánea dentro de dicho mercado; sin embargo, tras vender más de 8.5 millones de unidades a menos de 4 meses de su lanzamiento la compañía decidió establecerla como un producto habitual dentro de sus cafeterías.

Si bien la empresa no fue la primera cafetería en ofrecer el citado bizcocho, el éxito que adquirió el producto, el cual incluso llegó a agotarse a pocos días de su puesta en venta durante el mes de noviembre, le ha llevado no sólo a ser incluido dentro del menú habitual de sus franquicias, sino que incluso se buscará expandir el producto durante 2015 añadiéndole nuevos sabores y presentaciones, como la rellena de Crema Bávara, la cual hará su debut en las próximas semanas.

Cabe destacar que el éxito de dicho producto ha inspirado a otras marcas a crear productos crossover similares, tal es el caso de IHOP quien puso a disposición de sus consumidores por tiempo limitado una croissant con preparación de wafle llamado criss-croissant.

No cabe duda que la innovación sigue siendo vital dentro de cualquier industria para atraer la atención del consumidor; sin embargo, siempre será el consumidor quien determine los productos que formarán parte de sus día a día a través de sus hábitos de consumo, los cuales incluso pueden llegar a alterar la decisión de cualquier marca.