Ya hemos hablado en cómo la buena reputación de una marca se construye con base en las acciones que emprende como organización, pero también la gente que la conforman, donde los principales directivos tienen un peso trascendental.
Inicia la semana y tenemos los casos de Wanda y Red Bull, dos marcas que podrían resultar afectadas por las presuntas acusaciones contra Wang Jianlin, presidente del conglomerado chino y por la orden de aprehensión contra el nieto de uno de los fundadores de la marca del ‘Toro rojo’.
En el caso de Wanda, la compañía reaccionó de manera inmediata y, a través de su equipo de relaciones púbicas y comunicación atajó los rumores descalificando los reportes de prensa que presumen una supuesta detención de Jianlin. Mediante un comunicado las califica como “calumnias maliciosas”.
El tema es importante por la imagen del conglomerado que tiene relación con importantes marcas a nivel internacional, es accionista del club Atlético de Madrid, de España, incluso su nuevo estadio se llama Wanda Metropolitano (que espera su inauguración), también es dueña de Legendary Entertainment, productora de Hollywood que ha ganado relevancia en los últimos años (Warcraft y Kong, entre otras), así como propietaria de la cadena de cines AMC.
En el caso de Red Bull, la Interpol emitió una orden internacional de arresto contra Vorayuth Yoovidhya, nieto y heredero de Chaleo Yoovidhya, co-creador de la famosa bebida energética.
El motivo, es que la justicia tailandesa investiga a Yoovidhya por la muerte de un policía de tránsito en un atropello en Bangkok en 2012. El problema es que desde que se investiga (hace varios meses) el heredero no ha dejado de aparecer en eventos públicos, muchos relacionados con la marca, según reveló una investigación dela agencia AP. Recordemos que Red Bull es dueña de varios equipos de futbol profesional, un equipo de Fórmula 1, etc.
Al final, podría parecer un impacto de imagen y relaciones públicas, a las marcas no les viene bien estar relacionadas con cuestiones legales de ningún tipo, un impacto que podría llegar a los negocios. De acuerdo con EFE, Wanda Hotel Development, parte de Wanda Group, perdieron hasta 10 por ciento en la Bolsa de Hong Kong, luego de los rumores.
Un ejemplo de cómo es que impacta este tipo de situaciones, miremos lo que sucedió con Samsung. El viernes se dio a conocer que Jay Y. Lee, vicepresidente de la compañía surcoreana, fue condenado a cinco años de cárcel por corrupción y tráfico de influencias. Tras la noticia, la compañía lo resiente en la Bolsa de Seúl.