El Banco mundial inició este año con predicciones poco favorables en el ámbito económico, financiero y de las inversiones, afirmó que este 2023:  

“Se proyecta que el crecimiento mundial se desacelerará y experimentará el tercer ritmo más débil en casi tres décadas, solo opacado por las recesiones mundiales de 2009 y 2020. Se pronostica que el crecimiento de la inversión en los mercados emergentes y las economías en desarrollo se mantendrá por debajo de la tasa promedio de las últimas dos décadas. Otros choques adversos podrían empujar a la economía mundial a una recesión.” 

Economistas encuestados por The Wall Street Journal estimaron,  que la probabilidad de una recesión en los próximos 12 meses es de 63 por ciento, frente a una probabilidad media de 49 por ciento en julio. 

Por su parte, Combinator, una de las aceleradoras de startups más prestigiosas de Silicon Valley, advirtió a las empresas deben prevenir acciones para los peores escenarios, ante el derrumbe del mercado y una inminente recesión económica.

Ante el desplome de las acciones tecnológicas como Netflix, Shopify, Meta, entre muchas más, el capital de riesgo (Venture Capital) será más escaso y cada vez será más difícil conseguir financiamiento para los emprendedores.

“Nadie puede predecir qué tan mal se pondrá la economía, pero las cosas no se ven bien”, dicen algunas de las voces más experimentadas. 

Las grandes compañías que cotizan en la bolsa de Nueva York como Meta —matriz de Facebook, Instagram y WhatsApp—, Twitter, Uber o Netflix están tomando acciones para reducir sus costos. El fondo Tiger Global ha perdido 17,000 millones de dólares al vender sus acciones en Uber, Netflix o Rivian a un precio menor al que las adquirió en su momento

Amazon registró estos días la mayor pérdida anual de su historia como empresa pública, y esperan que la desaceleración de las ventas de la nube se prolongue. 

Por su parte, las ventas de publicidad de Google disminuyeron, marcando una tendencia en la baja de la contratación publicitaria año con año. 

La verdad es que ni los grandes gurús de las finanzas saben si la recesión es sólo un susto pequeño o si durará dos años. 

Hay mucha incertidumbre en los mercados tecnológicos en este momento. Coinbase, una de las plataformas de comercio de criptomonedas más populares, se ha visto afectada por el nerviosismo global: anunció que recortará a 1,100 empleados, que equivalen al 18 por ciento de su plantilla laboral. “Parece que estamos entrando en una recesión después de un auge económico de más de 10 años”, dijo en un blog el presidente ejecutivo de Coinbase, Brian Armstrong.

El CEO de Tesla, Elon Musk, que predice una “recesión leve” durante 18 meses hasta el CEO de Restoration Hardware, Gary Friedman, quien dijo que “cualquiera que piense que no estamos en una recesión está loco”.

La gente ha llamado a Microsoft: “a prueba de recesión”, pero incluso el gigante tecnológico está enfrentando la crisis, despidió a casi 1,000 trabajadores, a fin del año pasado, en un conjunto de despidos inusualmente grande para la empresa. 

Las acciones de Microsoft también han caído 29 por ciento, desde enero, junto con muchas otras compañías tecnológicas. 

“Ninguno de nosotros es inmune a los obstáculos macroeconómicos”, dijo el director ejecutivo Satya Nadella en una entrevista con Yahoo Finance y enfatizó que estamos en un periodo en el que todas las empresas necesitan “hacer más con menos”, como reducir los gastos operativos. Veremos cómo afecta en muchos rubros el tema de la recesión, al mundo de la tecnología y como son capaces de sortear estos problemas.