Por Eduardo Rodríguez
[email protected]
@ERodriguezD
En nuestro país, los mercados bursátiles son considerados como exclusivos y riesgosos. Después de leer esto, espero coincidas con nosotros que hace falta un extreme makover mercadológico para quitarnos todas esas ideas.
En primer lugar, la exclusividad de estos mercados financieros ha disminuido drásticamente en los últimos años. Hoy, se puede empezar a ser inversionista con un monto de 10 mil pesos. Para algunos, esto es muy poco dinero, para otros, es todo un capital. No es mi objetivo entrar en tan profunda discusión, así que me limitaré a comparar ese monto mínimo con los 500 mil pesos que se necesitaban para abrir una cuenta de inversión durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari. El número de personas que tienen 10 mil pesos es mucho mayor, al número de personas que tenían 500 mil pesos hace 20 años. Podemos decir que la bolsa de valores ha dejado de ser exclusiva.
En segundo lugar, la percepción en nuestro país de que los mercados financieros son riesgosos es definitivamente muy alta. El ciudadano mexicano promedio, piensa en la bolsa y quiere salir corriendo, los alemanes quieren también correr, pero hacia adentro. Con esto, no quiero decir que no exista riesgo, claro que lo hay, pero con una estrategia adecuada de inversión, éste se puede reducir… Si añadimos tiempo a la ecuación, se podría casi erradicar.
Sé y reconozco que hay personas que han salido muy mal libradas de sus incursiones en estos ámbitos, sobre todo en episodios famosos como la crisis petrolera de los años 70, el Crack de 1987, el efecto Tequila-Dragón-Samba-Beluga, etcétera o la tragicomedia del punto.com. Sin embargo, si la estrategia de inversión hubiera sido adecuada e hiciéramos cuentas, ahora que ha pasado el tiempo, podría garantizar que los resultados serían más que satisfactorios. Como ejemplo, el IPC de la Bolsa Mexicana de Valores ha subido 8 mil 987 por ciento de 1987 a la fecha (la inflación ha sido de 2 mil 290 por ciento). Dicho de otra forma, si hubieras invertido en el IPC de la Bolsa Mexicana de Valores, justo antes del crack de 1987, hoy tendrías casi 900 mil pesos por cada 10 mil pesos invertidos. En contra parte, los que metieron todo su dinero en Enron, Worldcom o similar, tendrían 0.00 pesos … Y la plena seguridad de que no invirtieron adecuadamente.
No quiero ser malinterpretado de ninguna manera. No estoy diciendo que deberíamos ver anuncios espectaculares en todo México que digan: “Ven, invierte en la bolsa y hazte millonario”. Eso sería peligroso, presuntuoso y estúpido. Me refiero a que si las cosas se hacen bien, con disciplina y sentido común, las inversiones en los mercados de valores son una de las mejores formas de hacer crecer el dinero. Pero poca gente lo dice, o lo sabe.
Sería un tonto si dijera que no se hace absolutamente nada para promover las inversiones financieras en México. Hay varias instituciones privadas que hacen una buena labor de promoción. Sin embargo, no es suficiente. Este esfuerzo mercadológico debería venir de muhco más arriba. Y es que también soy de los locos que piensa que los mercados bursátiles son buenos para el desarrollo de los países. Con peras y manzanas: si yo soy dueño de una empresa que emplea a 2 mil 500 personas y quiero expandir mis negocios puedo acudir a los mercados bursátiles para obtener el dinero que necesito. Si lo logro, emplearé a otros 2 mil 500, ganaré más dinero, pagaré más impuestos, seré un mejor ciudadano. La Bolsa Mexicana de Valores, así como el New York Stock Exchange o cualquier otra bolsa del mundo, fue creada para ofrecer alternativas eficientes de financiamiento a las empresas emisoras pero mientras menos inversionistas existan, más difícil es cumplir el cometido. Nuestra bolsa es la número 24 del mundo, mientras que nuestra economía es la número 15. El número de empleados que laboraban para las casas de bolsa en 1990 era de 9 mil 286, hoy son menos de 6 mil. En 1990 habían 199 empresas listadas en bolsa, hoy son 131. El número de cuentas de inversión es menor a 200 mil desde hace más de 20 años.
Es evidente que la promoción adecuada de este tema es buena para todas las partes, así que, ¿por qué no decirlo abiertamente? ¿Por qué no promover la imagen de los mercados bursátiles? Basta darse una vuelta por las páginas de internet de las distintas bolsas del mundo. Checar las revistas especializadas y encender la TV para darnos cuenta que hay mucho por hacer. ¡Mucho!
Aquí te incluyo un video tutorial de lo que es la BMV