Sin duda, la reapertura paulatina de los centros comerciales y tiendas departamentales fue un gran respiro para el sector retail en el mercado mexicano.

Con poco más de tres meses cerrados, estos puntos de venta se vieron particularmente afectados siguiendo el impacto que la pandemia tuvo en el sector a nivel mundial.

Los números de retail

En lo que concierne a esta nueva crisis sanitaria, se espera que el impacto del coronavirus será mayúsculo para el sector retail. Cuando menos así lo expone un reciente reporte de GlobalData, el cual revela que el gasto global en la industria minorista caiga un 3 por ciento durante 2020, equivalente a aproximadamente 549 mil millones de dólares.

En ese sentido, vale la pena citar datos del US Census Bureau, los cuales advierten que la categoría con la caída más fuerte en ventas ha sido la de ropa y accesorios, con una contracción de ventas de 78.8 por ciento; seguida de electrónicos, que ha tenido una contracción en ventas de 60 por ciento; mientras que la categoría de muebles y accesorios para el hogar ha visto una contracción de 58 por ciento.

En el caso particular del mercado mexicano, luego de presentar un pico de ventas, al paso de las semanas el sector retail ha visto diminuido este indicador.

Cuando menos así lo refiere Leslie Alonso, gerente de operaciones de Pabis Retail, quien dentro de un informe entregado por dicha compañía aseguró que luego de las compras de pánico -realizada en el país durante la semana del 16 de marzo-, las ventas entre los minoristas han caído.

“Este factor es claro interpretarlo pues en esa semana las ventas de diferentes categorías crecieron en promedio 97.5 por ciento y los inventarios cayeron 65 por ciento”, según Leslie Alonso.

Aún con reapertura, hay caída

Con estas cifras, la apertura de ciertos puntos de venta se perfiló como un impulso necesario para el sector minorista, mismo que aunque en la capital del país se vivió hasta la semana pasada, en otra estados de la República Mexicana, se experimento a mediados del mes pasado.

Si bien estas reaperturas se caracterizaron por grandes filas de la clientes a las afueras de las tiendas y plazas comerciales, lo cierto es que las cifras indican que para el sector será especialmente complicado reactivarse y volver a su punto de equilibrio.

Cuando menos así lo indica el más reciente informe entregado por la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicios y Departamentales (ANTAD), el cuan puntualiza que el consumo en las tiendas que son socias descendió durante le mes pasado, esto aun si se compran las tiendas que ya permanecían abiertas como las de reciente reapertura.

A decir de esta asociación, la venta de las tiendas iguales (es decir aquellas que tienen más de un alto de operación) reportaron descenso de -17.9 por ciento durante el mes de junio en comparación con lo registrado el mismo mes pero del año anterior.

En la misma linea, si se considera a las tiendas que abrieron en los últimos dice meses el desplome se calculó en -15.3 por ciento.

Entre ventas acumuladas y marcas en jaque

En otro sentido, la ANTAD afirmó que las ventas acumuladas durante el sexto mes del año, ascendieron a 584.4 mil millones de pesos.

Aunque la caída en ventas durante junio es menor a lo registrado en mayo cuando a tiendas iguales el descenso fue de -19 por ciento y en tiendas totales de -16.2 por ciento, lo cierto es que grandes marcas siguen padeciendo los efectos de la pandemia.

De esta manera, es importante mencionar que la Antad está conformada por más de más de 62 mil  tiendas y la superficie total de venta de estos establecimientos suma más de 23 millones de metros cuadrados. Entre sus tiendas afiliadas destacan marcas como 7-Eleven, Oxxo, Chedraui, Soriana, La Comer, Coppel, Liverpool, Sears,y el Palacio de Hierro.