Al desempeñar cualquier labor, oficio o profesión se crea una imagen personal que proyecta una marca que los demás recordarán. Lo ideal es diseñar dicha imagen, aunque en ocasiones hay personas que pueden proyectar de forma accidental aspectos que negativos que no tienen.

Lo ideal es encontrar formas de capitalizar las aptitudes para después integrarlas conscientemente a una marca personal que se proyectará con resultados positivos. De acuerdo con Yec, cualquier persona tiene la capacidad de construir su propia imagen, solo necesita realizar o verse involucrado en las siguientes situaciones.

Iniciar un blog o escribir para foros. Cada organización y sitio web tiene espacio para contenido original, ya que actualmente a los cibernautas les gusta los artículos cortos, en lugar de destinar mucho tiempo para leer un libro. Ser publicado hará que sea más probable que seas contemplado más adelante para hablar en eventos, o recibir algún reconocimiento o invitación para colaborar con alguna marca.

Conectar con personas con el mismo perfil profesional. El ejemplo más clásico son los periodistas, quienes siempre están buscando contenido y crean contactos entre ellos, además de que asisten constantemente a conferencias. Lo ideal es no tener miedo a tomar postura y buscar involucrarse para posteriormente intercambiar información y contactos para colaboraciones más adelantes.

Competir por reconocimientos. Desde un concurso hasta lanzar iniciativas proporcionará habilidades que necesitará más tarde para proyectar tu imagen o emprender un negocio.

Construir relaciones internacionales. Actualmente hay un énfasis en la sostenibilidad y mejoras sociales, en acciones sociales que puedan traer beneficios. Desde asociaciones, medios internacionales o contactos en el exterior serán útiles para construir tu marca personal, aumentar la visibilidad y relaciones públicas.

Asistir a eventos de networking. Si bien para algunas personas el trabajo en equipo puede resultar agotador, es preciso redimensionar la actividad y revalorar las relaciones con contactos profesionales que pueden ayudar a construir una marca personal. Desde amistades hasta patrocinios, las redes profesionales brindan aprendizaje para escuchar y hablar menos.