Como hemos comentado en otros artículos referentes al comercio, el Marketing Digital sigue convirtiéndose en una valiosa herramienta, pero a la vez vital para algunos fabricantes y cadenas comerciales, con la finalidad de incrementar ventas a través de Internet.

De acuerdo a los datos de la IAB, en el “Estudio de Consumo de Medios entre Internautas Mexicanos” de 2014, en México se cuenta con un mercado de 59.2 millones de internautas, un número de consumidores nada despreciable para aquellas empresas que están aprovechando la tecnología con la finalidad de llegar a su público objetivo, creando estrategias innovadoras, perfectamente ejecutadas y que conectan emocionalmente a través de los medios online con los usuarios acostumbrados a un número extremadamente alto de impactos publicitarios.

Durante 2013 las ventas de comercio electrónico en México ascendieron a 121 mil millones de pesos, de acuerdo a una entrevista realizada a Carlos Ponce Beltrán, presidente del Consejo Directivo de la AMIPCI. Esta actividad experimentó un crecimiento del 41.89% con respecto a 2012, cuyo valor fue de 85 mil 100 millones de pesos.

De acuerdo al estudio “Hábitos del Comercio Electrónico en México 2013” de la AMIPCI, el mes con mayor número de tráfico es diciembre con un 22%, aunque noviembre empieza a crecer con respecto a otros meses con un 12%. Esto se debe a esfuerzos importantes como la iniciativa del “Buen Fin” que incluye también los portales de internet de las empresas que participan en esta promoción, además de que muchas marcas anticipan sus ventas navideñas desde noviembre.

Tomando en consideración el mismo estudio, el 59% de los comercios evaluados realiza esfuerzos de publicidad en buscadores como Google o Yahoo, el 56% campañas de Email Maketing y el 52% una acción concreta en sus perfiles de redes sociales.

Al momento de realizar una acción de e-commerce, uno de los aspectos fundamentales que cualquier empresa debe ofrecer es la confianza para el usuario al navegar un portal. En mi opinión, 4 de los puntos más importantes que se deben cuidar son:

• Sitio web perfectamente programado y funcional. Cuando un usuario entra a un portal de comercio electrónico y encuentra links rotos o un tiempo de respuesta prolongado, le genera desconfianza o simplemente lo abandona, lo que representa una venta perdida para el retailer online. Es algo que se debe de cuidar previo a su lanzamiento a través de diferentes pruebas en la fase de “testing”.
• Navegación fluida. Existen sitios desarrollados a la perfección en cuanto a la navegación, a través de los cuales los usuarios se sienten cómodos a la hora de entrar a cada sección. Incluso muchos de ellos manejan lo que se conoce como “navegación intuitiva”, en la que los usuarios encuentran los diferentes pasos a realizar para una compra de manera fácil, sin complicaciones, lo que produce en primera instancia una grata experiencia y por consecuencia el regreso al portal.
• Help desk online. Cuando compramos en una tienda física, siempre habrá alguien de la cadena comercial que nos oriente cuando necesitamos encontrar algo o se nos presenta una situación en la que requerimos ayuda. Lo mismo debe suceder en una tienda en línea. Existen herramientas como chat, sección de FAQ’s (Frequently Asked Questions) donde se encuentran respuestas a lo que normalmente se pregunta por parte de los usuarios, correo de contacto, liga a redes sociales para emitir un comentario o realizar una pregunta, etc. Todo esto genera confianza y hace que la visita al sitio web sea agradable y se repita probablemente la compra.
• Diferentes métodos de pago. Aunque existen empresas reconocidas como PayPal o incluso las terminales digitales de VISA o MATER CARD, muchos portales están manejando métodos de pago adicionales. Esto sin duda incrementa la conversión a la venta, debido a que todavía en México nos encontramos con un alto porcentaje de usuarios que no tienen la confianza de introducir los datos de sus tarjetas de crédito a través de un sitio web.

Los portales de las empresas mexicanas deberían considerar estos factores, pero sobre todo, el contar con una estrategia de Comunicación y Marketing bien desarrollada y eficazmente ejecutada para llevar tráfico a los portales online, que produzca un alto número de visitas, traducidas en ventas, convirtiéndose así en un canal más para la comercialización de sus productos.