Al tratarse del primer cambio en el tipo de conector del estándar USB, el nuevo formato USB Tipo C tiene frente a sí un gran reto para lograr que las personas migren por completo a esta nueva tecnología. Y sumándose a este reto, los cables USB Tipo C han tenido que enfrentar una maña reputación propiciada por cables que destruyen laptos y smartphones.
Después de la polémica iniciada por un ingeniero de Google y que Amazon continuara al eliminar de su tienda los cables problemáticos, ahora la USB-IF ha establecido medidas para solucionar los problemas de seguridad para los usuarios.
La medida consiste en un protocolo que se ejecuta antes de que los dispositivos intercambien datos o haya paso de electricidad, por lo que de no cumplirse el nuevo estándar durante el protocolo, se evita que haya daños físicos.
A pesar de todo, la adopción del USB C ha sido bastante acelerada, ya que a la fecha aún existen muchas personas que jamás han utilizado la versión 3.0 y que en cambio llegarán al USB C por medio de dispositivos móviles y laptops que ya lo están incorporando, como en el caso de la MacBook de 2015, las Chromebook o smartphones como el Lumia 950.