La marca personal del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, enfrenta una crisis de marca luego de que retiraron su nombre de edificios en la ciudad de Nueva York.
El hecho ocurre luego de que residentes de estas edificaciones pidieron se retirara, haciendo de esta acción un recurso que nos recuerda la importancia de percepción en mercadotecnia.
Trump’s name is being removed from 3 NYC luxury apartment buildings at residents’ demand. Many cited their disagreement with his politics. pic.twitter.com/x9yJ6dekUM
— Rafal Hill (@rafalhill) 16 de noviembre de 2016
El impacto en la marca de Trump ha generado todo tipo de especulaciones en las que se habla del futuro de su marca.
Durante el proceso electoral en el que participó como candidato republicano, diversas marcas como Ivanka Trump aprovecharon para ejecutar estrategias de mercadotecnia que promocionaron su imagen e incrementaron su valor al lograr publicidad en eventos políticos.
La marca personal de Donald Trump tiene una característica muy importante, pues logró imponerse en un mercado de real state y convertir edificios en una extensión de su marca, donde se vive la experiencia Trump, elemento clave en marketing.
Esta diversificación de marca llevó su nombre del mercado de bienes raíces al de lujo, dentro de segmentos como la hotelería; el merchandising, con ropa que lleva su nombre grabado o el de vinos con una bodega que lleva impreso Trump.
Esta no es la primera vez que un marca personal crece a partir de su exhibición desde un escenario político.
Al Gore es un ejemplo excepcional de cómo un vicepresidente puede convertirse además de una marca personal, en embajador de un movimiento internacional como el cambio climático.
Otras marcas que han logrado este crecimiento dentro de nuevas áreas a partir de su exposición en el escenario político son el expresidente de México Vicente Fox, quien logró extender su marca personal a Centro Fox, un negocio que se enfocó en cursos educativos y la promoción de cultura política a través de un espacio que además sirve para llevar a cabo diversos eventos como visitas de líderes internacionales, tal como ocurrió con la llegada del Dalai Lama.
¡El #BuenFin vuela en @centrofox! Por cada $300 de consumo en @HSanCristobal recibe un pase para un vuelo cautivo. tel. 01(476)7570411 pic.twitter.com/dSpeE7ei5A
— Centro Fox (@centrofox) 16 de noviembre de 2016
